La "guerra del SMI" destapa el pulso de Yolanda Díaz y Podemos a Sánchez

Unidas Podemos ya ha marcado su línea a seguir de cara a este inicio de curso. Su estrategia pasará por hacer suyas las principales medidas sociales del Gobierno para sacarle el mayor rédito político posible y conseguir arañar votos por la izquierda al propio PSOE. Presionará a Sánchez hasta la extenuación, para seguir marcando la agenda y hacer suyas las decisiones más populares.

El penúltimo capítulo se ha vivido esta misma semana, con el evidente pulso echado por la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz; a la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, a cuenta de la inmediata subida del SMI de 950 a 965 euros: la primera lo anunció como un hecho, aunque no tiene la firma del Consejo de Ministros, cuando la segunda pedía moderarlo y retrasarlo unas semanas.

De hecho, desde el grupo parlamentario se han conjurado para "empujar" con "mayor ambición" en las medidas que adopte la coalición de cara a este nuevo curso parlamentario y va a potenciar las iniciativas de contenido territorial.

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Un ejemplo esa actitud a la que hacen referencia, que no es más que una medida de presión a su socio de Gobierno, se pudo comprobar con la enmienda que llegaron a presentar en la tramitación de los actuales Presupuestos Generales para paralizar los desahucios (que suscribieron con otros socios parlamentarios) y que luego "desembocó" en el compromiso alcanzado con el PSOE para elaborar la nueva Ley de Vivienda, que aún no se ha concretado.

También, los morados se centrarán en la redacción de iniciativas como la proposición de ley de Salud Mental, que pauta un aumento destacado de profesionales sanitarios a este campo asistencial, -intentando también, en este punto, restarle apoyos a Más País- o la de creación de una empresa pública de energía, mediante la recuperación de instalaciones hidroeléctricas cuyas concesiones vayan caducando.

Podemos exige una agenda social "ambiciosa"

De hecho, ya la semana pasada y durante el Consejo Ciudadano Estatal de Podemos, la secretaria general de la formación y la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, aseguró que en los próximos meses el Gobierno se "juega su reelección" y reclamó una agenda social "ambiciosa", donde debe ser "crucial" también aplicar una reforma fiscal en unos Presupuestos Generales del Estado (PGE) llamados a ser "imprescindibles" para la recuperación.

De cara a la negociación con el PSOE para confeccionar el anteproyecto de ley para las nuevas cuentas públicas, desgranó la necesidad de aplicar una reforma fiscal y una medida de "vanguardia" como un tipo fijo del 15% para las grandes empresas en el impuesto de Sociedades, siguiendo la estela del acuerdo internacional en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

La 'tasa rosa', medidas de conciliación y subir las pensiones

También enumeró otra de las prioridades del partido morado, la eliminación de la denominada 'tasa rosa' (como popularmente se conoce al mayor precio que tienen determinados productos femeninos) y bajar el IVA a las peluquerías del 21 al 10%.

Junto a ello, también presionarán al ala socialista del gobierno con la ampliación de los permisos de paternidad y maternidad a 6 meses, la extensión de la red de escuelas infantiles públicas, una prestación por crianza universal y subir las pensiones mínimas y no contributivas.