| 22 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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El Rey y Javier Fernández se saludan en la recepción del 12 de octubre.
El Rey y Javier Fernández se saludan en la recepción del 12 de octubre.

El Rey al rescate del PSOE: Fernández busca su ayuda para amansar a los críticos

El presidente de la gestora intenta evitar que la sangre llegue al río en la calle Ferraz el domingo. Y para ello está buscando todo tipo de aliados, incluido el mismísimo Felipe VI.

| Ana Isabel Martín España

Javier Fernández empieza a ver la luz al final del túnel -claridad que la semana pasada en los actos del 12 de octubre no veía- después de que diputados pedristas como César Luena y Adriana Lastra se comprometieran este martes a mantener la disciplina de voto. Esto es, prietas las filas para que la gestora no tenga que recurrir a una abstención técnica, o más bien vergonzante, de 11.

Pero que nadie se lleve a engaño. Los partidarios del no es no piensan plantar batalla en el Comité Federal del próximo domingo, de donde saldrá la postura del PSOE para la futurible investidura de Mariano Rajoy. Javier Fernández y Susana Díaz se temen que ese día volarán cuchillos, aunque han hecho números y parecen salirles.

No obstante el presidente de la gestora del PSOE, el pacificador, quiere evitar a toda costa que la sangre llegue al río en la calle Ferraz, reeditando lo sucedido en el Comité que acabó con la dimisión forzosa de Pedro Sánchez. Y para ello está buscando todo tipo de aliados, incluido uno de altura: el mismísimo Felipe VI.

De Rajoy quería Fernández que se mantuviera callado y así lo ha hecho el presidente en funciones todo este tiempo. Del Rey quiere todo lo contrario: que hable alto y claro en favor de una solución para la gobernabilidad de España, y que lo haga 36 horas antes del Comité Federal decisivo. En Oviedo para más señas.

Fernández quiere que el Rey se pronuncie alto y claro en favor de la gobernabilidad 36 horas antes del Comité Federal del PSOE

El viernes el jefe del Estado presidirá la entrega de los Premios Princesa de Asturias y el susanismo confía en que su discurso allane el terreno para el domingo. Obviamente el Monarca no va a mostrarse partidario de que gobierne el más votado, faltaría más dado el papel de árbitro que tan asumido tiene. Pero bastará con que reitere un mensaje en el que ya ha incidido en varias ocasiones desde las elecciones del 20 de diciembre, la última ante la 71º Asamblea General de Naciones Unidas: el del "diálogo", el "sentido del deber" y el "compromiso". 

Don Felipe tiene por costumbre pronunciar discursos de calado en estos premios anuales, que antes llevaban su nombre y ahora el de la Princesa Leonor. De hecho en la edición de 2015 hizo un alegato en favor de la unidad de España -"las divisiones solo empobrecen y aíslan a un pueblo"- y de la "legalidad y los principios constitucionales" en plena ofensiva independentista; puesto que la cita en Oviedo tuvo lugar entre las elecciones catalanas de septiembre y la declaración del Parlament dando por iniciado el proceso de desconexión en noviembre.

Así que Fernández cuenta con que el Rey le eche una mano desde el Teatro Campoamor el viernes.

Después de muchos meses de perfil bajo, de viajes suspendidos y de morderse la lengua viendo cómo la clase política era incapaz de desencallar el país, Felipe VI volverá en esa cita a recuperar un protagonismo que mantendrá al inicio de la próxima semana con la ronda de consultas que ha convocado para el lunes y martes 24 y 25. Será la quinta desde diciembre.

Si se cumple el guión previsto el martes por la tarde, tras entrevistarse con Rajoy, se anunciará que lo propone nuevamente como candidato a la investidura. Según explicó el portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, el Pleno podría arrancar el miércoles 26, la primera votación sería el jueves 27 y la segunda y definitiva el sábado 29. Es decir, dos días antes de la bocina de la disolución de las Cortes, que si no hay candidato sonaría el lunes 31.