Tres en cuatro años: Sánchez quema a sus ministros de Justicia en tiempo récord

La actual ministra de Justicia, Pilar Llop, puede pasar a engrosar la lista de ministros quemados por Pedro Sánchez en general -y de Justicia en particular- tras asumir ella este miércoles en el Congreso la responsabilidad de los errores de la ley del sólo sí es sí.

Aunque continúe en su puesto y su cabeza al final no sea servida en bandeja de plata para aguantar la coalición de Gobierno, Llop ya ha quedado achicharrada en un ministerio donde Sánchez acumula tres ministros en apenas cuatro años.

Pilar Llop ha sido la escogida por Pedro Sánchez para lanzarla a los lobos de Podemos por las excarcelaciones y rebajas de penas a agresores sexuales en aplicación de la ley del sólo sí es sí que tanto daño está causando a la imagen del Gobierno.

La ministra de Justicia primero mandó un recado a los podemitas en la cadena SER -la famosa frase de la herida- y en el Congreso ha asumido "total y personalmente los efectos gravísimos" que ha generado la ley impulsada por Irene Montero y de la que Podemos no admite errores.

Llop reconoce la chapuza “gravísima” del sí es sí y se responsabiliza de la reforma

Dolores Delgado y Juan Carlos Campo

El titular del ministerio de Justicia es una vez más es utilizado como parapeto por Pedro Sánchez ante decisiones polémicas, porque antes de Pilar Llop quemó a sus dos antecesores. La primera ministra de Justicia de Sánchez, Dolores Delgado, fue pisando charcos como su actuación en el juicio del procés -como no defender correctamente al juez Llarena o no pedir la rebelión- o sus polémicos audios con el excomisario Villarejo, hasta el punto de que fue reprobada tres veces.

Llop y Campo, en el traspaso de la cartera de Justicia.

Dolores Delgado no aguantó dos años como ministra de Justicia y Pedro Sánchez la cambió por Juan Carlos Campo, con un perfil más bajo que el de Dolores Delgado pero que tuvo el honor de ser el ministro de Justicia que aprobó los indultos a los líderes del procés, una de las decisiones más conflictivas y cuestionadas de Sánchez.

Campo, como Dolores Delgado, no duró ni dos años en el ministerio, siendo sustituido por Pilar Llop, al que ahora el tsunami provocado por la ley del sólo sí es sí amenaza con llevársela por delante.

Eso sí, Sánchez recoloca muy bien a sus ex ministros de Justicia por los favores prestados: Dolores Delgado fue nombrada fiscal general del Estado y Juan Carlos Campo ha sido nombrado recientemente magistrado del Tribunal Constitucional.