El PSOE da la coalición por amortizada y prevé movimientos tras los Presupuestos

Tablas, de momento. Una hora y cuarenta minutos de reunión "constructiva" en el Congreso de los Diputados ha tratado de apagar el último incendio entre PSOE y Podemos a cuenta de la reforma laboral. Una batalla que esconde un cisma mucho más profundo, que mira al próximo ciclo electoral. De momento el matrimonio se emplaza a seguir hablando.

"En un par de meses esto va a ser la guerra". Esta advertencia parte de un diputado del PSOE y resume el clima ambiental en la coalición gubernamental. Este dirigente socialista próximo al núcleo duro de Ferraz va más allá, fijando un horizonte temporal para que "alguien" de un golpe sobre la mesa del Consejo de Ministros: la aprobación definitiva de los Presupuestos Generales del Estado y el cierre del periodo de los congresos autonómicos del PSOE.

"La coalición está amortizada, después no habrá ruptura... pero cada uno a los suyo", remacha este dirigente para subrayar que tanto la cúpula de Ferraz como la de los morados está a punto de activar ya su maquinaria electoral. De hecho, el discurso de Pedro Sánchez en la clausura del 40 Congreso Federal fue el pistoletazo de salida de la larga campaña que se dispone a activar el líder socialista bajo un lema y un argumento ya apuntado en Valencia para dar la batalla a su izquierda: "socialdemocracia".

Los nuevos líderes regionales del PSOE tienen ya el mandato de Ferraz: activar su maquinaria electoral para hacer frente a Yolanda Díaz

En esa clave ven las fuentes socialistas consultadas el incendio desatado por Podemos a cuenta de la reforma laboral. Los morados acusan en privado a Sánchez de "jugar a dos barajas" prometiendo una derogación que él mismo sabe que es "imposible" por el mandato de Bruselas.

El encargo de Sánchez a "SuperBolaños" y Lastra: un plan integral antiYolanda

Ambos socios reconocen que no habrá "ruptura traumática" de la coalición porque no interesa ni a Sánchez ni a Yolanda Díaz trasladar la imagen de demolición de la alianza progresista. Pero una vez que acaben los congresos regionales socialistas su nuevos líderes tienen ya la orden expresa de Adriana Lastra: preparar el partido para pelear en cada provincia el caladero electoral de Podemos y del Frente Amplio que diseña Yolanda Díaz.

Con los PGE aprobados a final de año, Sánchez se habrá garantizado la legislatura completa. Y, en palabras de otro dirigente del PSOE, "cada uno ira a lo suyo". Más aún. En el horizonte unas elecciones andaluzas claves para Sánchez y las municipales y autonómicas de 2022, cuyo resultado marcará la fecha de las generales y su posible adelanto.

Sánchez y Yolanda Díaz: comienza la partida de ajedrez del nuevo ciclo electoral en España.

Bajo esta premisa, PSOE y Podemos han tratado este lunes de echar agua a la gasolina de la reforma laboral. Una foto para calmar las aguas ante la escaramuza protagonizada por Yolanda Díaz y Nadia Calviño.

Más de hora y media de cumbre "constructiva"

El encuentro, que se ha prolongado durante una hora y 40 minutos, se ha producido en un clima "constructivo", según ambos partidos. Mientras que el PSOE ha afirmado que la reunión ha sido "constructiva", con "buen tono" y que se han emplazado a seguir hablando, desde Unidas Podemos rebajan el optimismo y han asegurado que "será necesario seguir negociando dado que por el momento no hay un consenso sobre la reforma laboral".

En la reunión han participado el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños; la ministra de Hacienda, María Jesús Montero; la vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra; y el portavoz en el Congreso, Héctor Gómez.

En cuanto a la delegación del partido morado, ha estado compuesta por Ione Belarra, Irene Montero; el portavoz en el Congreso, Pablo Echenique; el secretario de Estado para la Agenda 2030 y dirigente de IU, Enrique Santiago; el jefe de gabinete del Ministerio de Trabajo, Josep Vendrell, y el secretario de Estado de Empleo y Economía Social, Joaquín Pérez.

Próxima "parada del lío": el sí es sí

En Moncloa y en Ferraz no quieren más ruido con este asunto porque asumen que a quien desgasta la batalla permanente es al propio Sánchez. La orden ahora es rebajar el sufflé. Por eso, el nuevo portavoz de la Ejecutiva Federal, Felipe Sicilia ha restado importancia a esta nueva enganchada y ha asegurado que el Gobierno está "fuerte, sólido", y en condiciones para acabar la legislatura.

Eso de puertas afuera. En clave interna los socialistas se preparan para pelear de tú a tú con Podemos en los próximos meses. ¿Próxima escaramuza?: la prostitución y la Ley del sí es sí de Irene Montero. Por eso, lo de este lunes ha sido solo una tregua.