| 29 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
Un militar español, en la noche de este martes, ayudando a bajar del avión a un refugiado afgano que huye del régimen talibán.
Un militar español, en la noche de este martes, ayudando a bajar del avión a un refugiado afgano que huye del régimen talibán.

Sánchez negocia con los talibán mientras las feministas de Podemos y PSOE callan

La embajadora de España en Qatar abre la primera vía directa con el régimen islamista mientras Defensa culmina nuevas repatriaciones de excolaboradores del Ejército.

| J.R.V España

Una vez más, en el Gobierno de Pedro Sánchez, del dicho al hecho hay trecho. En una coalición que dice tener el feminismo como bandera, PSOE y Podemos callan este miércoles ante el primer acercamiento oficial entre los talibanes y La Moncloa.

Una primera toma de contacto entre el Ejecutivo progresista y el régimen de los barbudos que se produce, además, mientras el Ministerio de Defensa apura la repatriación de los antiguos colaboradores del Ejército y de Exteriores que huyen del terror y las amenazas de muerto de los islamistas. 160 de ellos aterrizaron en la noche de este pasado martes gracias a las negociaciones entre el CNI y Paquistán.

Ha sido la embajadora de España en Qatar, Belén Alfaro Sánchez, la primera representante del Gobierno en mantener un contacto con un miembro del nuevo régimen talibán que gobierna en Afganistán, al haber asistido a un encuentro en Doha junto a varios diplomáticos occidentales, según han confirmado fuentes diplomáticas.

Alfaro participó este martes en el encuentro celebrado en Doha por una delegación integrada por diplomáticos de Estados Unidos, la UE y otros países occidentales con representantes del régimen talibán, con su ministro de Exteriores en funciones, Amir Jan Muttaqi, a la cabeza, han confirmado estas mismas fuentes.

En concreto, en la reunión, organizada por el Gobierno de Qatar, participaron Estados Unidos, la UE, Alemania, Francia, Noruega, Italia, Reino Unido, Países Bajos, Suecia, Canadá y Suiza, además de España, según detalló el portavoz del Departamento de Estado norteamericano. Por que Moncloa y Exteriores no han optado, en este caso, por la transparencia informativa.

 

Sánchez con el ministro de Exteriores, José Manuel Albares.

 

Según fuentes diplomáticas, durante la misma se habló sobre la necesidad de garantizar el "paso seguro" de los afganos que quieren abandonar el país, "la importancia de la lucha antiterrorista, el imperativo de respetar los Derechos Humanos" de todos los ciudadanos, incluidas las minorías y mujeres y niñas, así como la "gobernanza inclusiva y el acceso humanitario y de la ayuda humanitaria", precisó el portavoz estadounidense.

Este primer contacto del Gobierno español con los talibán se produce después de que entre el lunes y el martes hayan llegado a España más de 240 antiguos colaboradores afganos y sus familias en dos aviones procedentes de Islamabad tras haber conseguido escapar de Afganistán, quienes se suman a los más de 2.000 llegados en agosto.

Mientras un sector del PSOE y, sobre todo Podemos, acusan a PP y Vox de poco menos de antifeministas, Moncloa ha dado luz verde a los primeros contactos con un régimen que nada más llegar al poder ha comenzado su persecución a las mujeres.

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ya dejó claro el pasado 30 de agosto durante su comparecencia en el Congreso que el Gobierno no se planteaba reconocer al nuevo régimen talibán pero no excluyó "contactos operativos" con vistas a poder seguir sacando del país a afganos que colaboraron con España, hacer llegar ayuda humanitaria para la población y "garantizar el respeto de los Derechos Humanos, en particular los de las mujeres y las niñas".  Sin embargo, esas repatriciones se han basado en los contactos de los Servicios de Inteligencia españoles con el gobierno paquistaní.

Según ha explicado el portavoz del Ministerio de Exteriores talibán, Abdul Qahar Balkhi, en un comunicado, España y el resto de asistentes se han mostrado partidarios de "continuar este tipo de reuniones en el futuro". El ministro talibán advirtió a los asistentes de que "debilitar al gobierno afgano no va en el interés de nadie porque sus efectos negativos afectarán directamente al mundo en el sector de la seguridad y la migración económica desde el país".

Moncloa tiene además un handicap añadido ya que el nuevo embajador designado para Kabul, Ricardo Losa, no ha podido tomar posesión de su cargo. Aunque fue nombrado en el Consejo de Ministros del 3 de agosto, Albares pidió a su antecesor, Gabriel Ferrán, que permaneciera en Kabul dado el cariz que estaba tomando la situación y fue este quien se encargó de coordinar el operativo de evacuación, tanto de los españoles como de los colaboradores afganos y sus familias.