| 23 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Pedro Sánchez y María Jesús Montero
Pedro Sánchez y María Jesús Montero

Sánchez traga con Podemos y planea un impuesto para contentar a su electorado

La ministra de Hacienda responde a las CCAA del PP que rebajan impuestos con posibles nuevos “hachazos fiscales” camuflados en “impuestos a grandes fortunas

| Miguel Centeno España

Después de la polémica interna en el Ejecutivo a cuenta de la idea de centralización de impuestos  aportada por el ministro Escrivá, que ha supuesto una auténtica bomba entre los socialistas y que rápidamente han intentado sofocar desautorizando al ministro de Seguridad Social, Moncloa trata ahora de “reconducir” el debate criminalizando la bajada de impuestos anunciada en Andalucía. 

El objetivo del Gobierno pasa por condenar la bajada fiscal en las autonomías gobernadas por el PP aludiendo a que el gasto público debe ser compensado con ingresos mediante cargas fiscales. Pero Sánchez quiere evitar que sea la clase media la que pague esos impuestos, o esas sus sus intenciones comunicativas. 

Por ello, para ganarse a sus votantes y a los de Unidas Podemos, ha optado por valorar la posibilidad de aplicar una nueva carga fiscal propuesta por la formación morada: un impuesto a grandes fortunas” que refuerce su campaña de propaganda sobre “acercarse a la gente” y pisar la calle de cara a las próximas elecciones municipales y autonómicas de 2023. 

Una estrategia que se ha encargado de presentarla a la ciudadanía la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, quien ha asegurado que el objetivo de Moncloa con todo ello es “explorar que las grandes fortunas hagan una mayor aportación” a las arcas públicas. Además, Montero ha señalado que es necesario "armonizar" algunas cargas fiscales de competencia autonómica para evitar, dice, la "competencia fiscal a la baja”.

Es decir, intervenir competencias fiscales autonómicas en regiones gobernadas por la oposición. “Es dumping fiscal”, ha reiterado la titular de Hacienda, al tiempo que recalcaba que la bajada de impuestos planeada por el PP es, en la práctica, una eliminación casi total de figuras fiscales que podría generar “paraísos fiscales” en el interior del país. 

Lo más destacado de todo ello, es que esa propuesta de añadir un nuevo impuesto a grandes fortunas, fue una propuesta de Unidas Podemos, la cual fue obviada por la parte socialista del Gobierno. Ahora, conscientes de que las encuestas van a la baja y el PSOE sale como principal perjudicado, han moldeado su discurso y se hacen con la medida “morada”. 

“No se trata de que lo pidan unos o que lo pidan otros, se trata de que estamos de acuerdo todos los miembros del Gobierno en que tenemos en este momento que pedir un mayor esfuerzo a las grandes fortunas, a la banca, a las energéticas”, ha explicado Montero, queriendo dejar claro que, solo en este caso concreto, sí es una propuesta de todo el Ejecutivo. 

En todo caso, Montero ha situado este debate sobre las figuras fiscales gestionadas por las comunidades "en el marco del debate del sistema de financiación". "Eso es lo que corresponde con independencia de que el Gobierno pida más esfuerzos a aquellos que más tienen", ha dicho, dejando la puerta abierta a que el Ejecutivo central añada más “hachazos fiscales” para gravar a grandes patrimonios para financiar el "ingente" gasto público.

Una estrategia, la de proponer este nuevo impuesto, que se suma al resto de cargas fiscales a grandes energéticas y banca que tramita en estos momentos el Congreso. La ministra de Hacienda ha defendido que esa es la vía y que hay que "seguir explorando más impuestos a las grandes fortunas", esgrimiendo que "hay que pedir una mayor aportación a aquellos que más tienen”.

Respecto a la fórmula para lograr la armonización fiscal entre comunidades autónomas Montero no ha concretado nada y se ha limitado a señalar que todo "pasa por el margen que tienen" estas administraciones y que hay que encontrar una "horquilla" que se considere "lógica" para "hacer que no sea posible la competencia fiscal a la baja”.En todo caso, ha dicho que en el curso de los trabajos sobre la financiación autonómica no se está "en ese nivel de debate", ya que las discusiones se encuentran en niveles técnicos preliminares.