| 19 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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El magistrado Enrique Arnaldo junto al diputado del PSOE, Odón Elorza.
El magistrado Enrique Arnaldo junto al diputado del PSOE, Odón Elorza.

Cisma en PSOE y Podemos: diputados se rebelan y desoyen las amenazas por el TC

La votación de los candidatos al Constitucional acaba marcada por la revuelta en los partidos que sostienen al Gobierno. Pero también en el resto. Se contabilizan 11 "rebeldes".

| J.R.V España

Ni las presiones, advertencias y amenazas de sanción han evitado la revuelta en el PSOE y Podemos. Reducida y anécdotica, pero significativa del esperpento que reina en la coalición progresista.

Porque, finalmente, el Pleno del Congreso ha aprobado en votación secreta los nombramientos que le corresponden para renovar el Tribunal Constitucional y el Tribunal de Cuentas, pero lo ha hecho con menos votos de los que suman el PSOE, el PP y Unidas Podemos, las tres formaciones que pactaron las candidaturas. Los dos partidos del Gobierno de coalición más los populares suman 242 escaños, que con los socios electorales del PP (Foro Asturias y UPN) podrían llegar a 245 diputados, pero la mayoría de los candidatos propuestos no ha llegado a los 240 votos.

El portavoz socialista en la Comisión Constitucional del Congreso, Odón Elorza, ha decidido finalmente no apoyar con su voto la elección de Enrique Arnaldo, uno de los dos candidatos propuestos por el PP para ser magistrado del Tribunal Constitucional, en el marco del acuerdo que los populares sellaron con el Gobierno para renovar esta institución.

Así lo ha anunciado el propio Elorza a través de un mensaje publicado en su cuenta de Twitter, en el que detalla que antes de emitir su voto telemático comunicó su posición a la dirección de su grupo parlamentario que ahora encabeza Héctor Gómez.

La semana pasada, Elorza sometió a Arnaldo a un duro interrogatorio en la Comisión de Nombramientos que avaló su idoneidad para el cargo, pero acabó respaldando su candidatura, igual que el PP y Unidas Podemos, conforme al pacto. Eso sí, días después avanzó que este jueves, cuando el Pleno tuviera que pronunciarse sobre el polémico candidato del PP, tendría votar con una "pinza en la nariz".

La Elorza de Podemos

También ha habido cisma en Unidas Podemos, que asume que en su grupo parlamentario del Congreso ha habido al menos un voto díscolo. Fuentes parlamentarias apuntan a las diputadas Gloria Elizo, vicepresidenta tercera del Congreso, y la canaria Meri Pita, portavoz de Política Territorial, que firmaron un artículo criticando la elección de Arnaldo y Concepción Espejel como candidatos del PP al TC al considerarlos inadecuados por su afinidad con los 'populares'.

La votación es secreta y por vía telemática, por lo que no será posible identificar los posibles votos díscolos en los grupos parlamentarios y el Congreso sólo facilitará el resultado final.

Revuelta también en la oposición

Vox y Ciudadanos, así como socios habituales del Gobierno, como ERC, Bildu y BNG, y otros partidos minoritarios como Junts, la CUP o el PDeCAT han decidido no participar en la votación.

Todos ellos coinciden en justificar su plante en señal de protesta: los de Santiago Abascal e Inés Arrimadas por el "teatrillo" que consideran que han protagonizado los dos partidos mayoritarios para actualizar los órganos constitucionales, y el resto de fuerzas independentistas y nacionalistas singularmente por los nombres que el PP ha puesto encima de la mesa para el Alto Tribunal.

Vox y Cs han querido ratificar su rechazo al acuerdo PSOE-PP no votando los nuevos integrantes del TC o el Tribunal de Cuentas. El portavoz parlamentario de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, ha confirmado que ninguno de sus diputados ha participado en esta "parodia" porque respetan las instituciones y la democracia y porque no pueden avalar a unos candidatos que no han sido nombrados por su cualificación sino "por recibir una llamada de Ferraz, Génova o la sede del Podemos".