| 29 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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Santiago Abascal, Ramón Tamames y Pedro Sánchez, los protagonistas de la semana política
Santiago Abascal, Ramón Tamames y Pedro Sánchez, los protagonistas de la semana política

La moción de Vox con Ramón Tamames: el gran error que beneficia a Pedro Sánchez

Hugo Pereira analiza la moción de censura a Pedro Sánchez propuesta por el partido de Santiago Abascal: con el objetivo de distanciarse del PP de Feijóo, están beneficiando a Pedro Sánchez.

| Hugo Pereira España

En política se puede hacer de todo, menos el ridículo. Y es radicalmente así: en primero de marketing político se estudia que cuando un partido político se pierde en la ambición, aplicando una estrategia política ilógica para diferenciarse de sus competidores y, en suma, deja de ser útil para la sociedad, se ve -sin paliativos- abocado al abismo de la irrelevante desaparición. Vean, verbigracia, el caso de UPyD, el de Ciudadanos y, paulatinamente, el de Unidas Podemos.

VOX está haciendo todo lo contrario a lo que dicta el sentido común y cualquier manual de Ciencia Política. No sé quiénes son sus asesores -a alguno conozco- pero, desde luego, son un chollo para Pedro Sánchez. Le están haciendo la campaña con los múltiples balones de oxígeno que le están brindando. Dicen las malas lenguas, posiblemente malpensados, que VOX sin Pedro Sánchez ni Podemos no tendría discurso ni acción política y que son, por ello, los primeros interesados en que no abandonen La Moncloa. Vamos a no creerlo. Pero, como diría José Mota, y si sí.

 

La moción de censura propuesta por el partido de Santiago Abascal es todo un error político

La moción de censura planteada por VOX y cuyo candidato, previsiblemente, será Ramón Tamames es un claro ejemplo de error político.

En primer lugar, porque, aunque por condición sine qua non no se encuentre el ganarla, si se pierde acaba legitimando al que ostenta el poder en ese momento. Es evidente y cae de cajón. Si se monta una moción de censura para demostrar el hartazgo con el gobierno de Pedro Sánchez y tratar de arrastrarlo, así, democráticamente hacia su caída política y no se consigue, el claro beneficiado, lógicamente, es el mismo Pedro Sánchez que ratifica el apoyo que le otorga un Congreso elegido legalmente por sufragio. Ni más ni menos. Y, lo peor, es que desde VOX proponen una moción de censura que se sabe de antemano, sin ápice de duda, que se perderá. Y que ganará el actual presidente del Gobierno.

En segundo lugar, porque a la vuelta de la esquina hay unas elecciones autonómicas y municipales; y, en menos que canta un gallo, ya estaremos en elecciones nacionales a finales de este año. Las elecciones son la verdadera moción de censura: todas las encuestas de las empresas demoscópicas que no se llaman 'CIS de Tezanos' apuntan ya tendencialmente a un cambio político. Todas, sin excepción, dan como ganador a Alberto Núñez Feijóo que sumaría mayoría absoluta con VOX

 

En tercer lugar, porque Ramón Tamames ya no representa la política actual. Es un histórico, eso sí, pero que estaba completamente en el olvido político. No es un Felipe González. No. Es una persona de elevada edad que es completamente irreconocible -por desgracia- por los más jóvenes y todo un recuerdo desempolvado para los más mayores. Fue, en efecto, un claro luchador por el fin de la dictadura de Franco, un destacado miembro del Partido Comunista y el cofundador de Izquierda Unida. Sí. Una persona con enorme relevancia durante los momentos más destacados de nuestro tránsito hacia la democracia y su posterior consolidación, pero un completo descontextualizado en el tan diferente contexto político actual.

En cuarto lugar, porque a Pedro Sánchez no le temblará el pulso a la hora de tachar de ‘facha’ y de títere de la ultraderecha a Ramón Tamames. Se reirán los del PSOE y Unidas Podemos en toda su cara. Como lo hicieron expulsando a Leguina de un PSOE que ya ni existe -queda un ‘Partido Sanchista’- y tachando, como no, también de ‘facha’ a Felipe González. Si alguno de los defensores de la moción de censura de VOX se cree que Sánchez y afines sentirán pavor al ver en la tribuna del Congreso a Tamames, sencillamente es que, tras todo este tiempo, aún no conocen a Pedro Sánchez. Como diría Pablo Iglesias, se la refanfinfla y se la bufa. Y, para más inri, ganará la moción de censura. Le han puesto los de VOX encima de la mesa una campaña electoral que ni en sus mejores sueños se imaginó Sánchez.

Y todo para atacar al PP de Feijóo y tratar de marcar la diferencia. Lo peor de todo es que este balón de oxígeno a Sánchez, única y exclusivamente, responde a una estrategia -errónea- de marketing político de VOX: que se hable de esto en la prensa y no caer, así, en el tan tenebroso olvido mediático; y, dos, tachar de ‘derechita cobarde’ a un PP que por, sentido común, no votará que Sí a la moción. 

 

Ciertamente, esta estrategia de votar juntamente con la izquierda o beneficiarla directamente con teatros políticos para diferenciarse del PP ya viene de lejos. En la Comunidad de Madrid lo saben bien: votaron en contra de los necesarios Presupuestos de Ayuso para mejorar la vida de los madrileños -y todo porque Rocío Monasterio llegó tarde, mal y arrastro a la presentación de las enmiendas-; no contentos con eso, votaron en contra de la aprobación del plan urbanístico en el Ayuntamiento de Madrid para acabar con toda la regulación de la época de Carmena; y, más recientemente, votaron en contra del dictamen presentado por el PP en la Asamblea que rechazaba la nefasta gestión de los Fondos Europeos llevada a cabo por el gobierno de España.

Con tantos guiños y balones de oxígeno que le está lanzando VOX a PSOE, hasta le acabarán poniendo encima de la mesa la hoja de afiliación. Se están convirtiendo en su mejor aliado.