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Sánchez culpa a la organización de la OTAN de que Biden le despachara tan rápido
El presidente del Gobierno asegura que aunque fue un encuentro breve le dio tiempo a hablar de muchas cosas con su homólogo norteamericano. "Es una primera toma de contacto".
"Yo no tengo un cronómetro de cuánto me he reunido o no con el presidente de Estados Unidos pero le puedo garantizar que ha sido un poco más de esos segundos". Así ha salido Pedro Sánchez al paso de la controversia generada por su encuentro con Joe Biden en un pasillo de la OTAN, que La Moncloa había vendido como planetario y ha resultado ser un brevísimo intercambio de saludos.
El presidente del Gobierno ha llegado a culpar a las prisas de los "servicios de la OTAN" de que su primera conversación con su homólogo norteamericano haya sido tan fugaz. Puesto que, según él, les estaban apremiando para que pasaran a la sala de reuniones.
No obstante, atendiendo a la versión de Sánchez, en tan poco tiempo les ha dado tiempo a conversar de muchísimo, en lo que ha calificado como una "primera toma de contacto".
En concreto, el socialista ha hablado a Biden de reforzar los lazos militares (y ha aludido al acuerdo bilateral en materia de Defensa que incluye las bases de Rota y Morón de la Frontera), de la situación en Latinoamérica y su crisis migratoria y le ha felicitado por su "agenda progresista" y su vuelta a los "grandes consensos multilaterales".
La parte buena para Sánchez es que este lunes se ha confirmado que España acogerá la cumbre de la OTAN de 2022, lo que ha servido para mitigar algo el papelón con Biden.
