Radicales de media Europa y proetarras llegan a Cataluña a prender el polvorín

La consigna es clara: "Máxima alerta". Los servicios secretos de Reino Unido, Francia, Italia y Alemania han advertido en las últimas horas a sus colegas del Centro Nacional de Inteligencia: "Lo mejor de cada casa estará el fin de semana en Barcelona". Ese lo mejor de cada casa al que se refieren fuentes del CNI consultadas por ESdiario son los militantes de la red anarquista europea, dispuestos a incendiar Cataluña este 1-O si el referéndum ilegal es, como se prevé, abortado por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Un movimiento anarquista, en especial el italiano, sólidamente radicado ya en Cataluña desde hace varios años, impulsor del más violento movimiento okupa de la Unión Europea y estrechamente ligado a la CUP y a sus juventudes radicales, Arrán. A estos grupúsculos, altamente violentos y movilizados, es a los que la Guardia Civil atribuye los graves destrozos que sus unidades sufrieron el pasado miércoles 20, durante el desarrollo de la Operación Anubis.

Bildu ha convocado "jornada de lucha" este domingo en Barcelona. Y va a fletar al menos ocho autobuses con radicales proetarras

Y son los mismos que ya prendieron las calles de Barcelona -el barrio de Gracia, en concreto- en mayo de 2016 entorno al llamado Banc Expropiat, cuartel general de los antisistema.

Algarada callejera tras el golpe mortal asestado al núcleo duro del referéndum

Pero es que, además, según ha sabido este diario de fuentes de la Consejería de Interior del Gobierno Vasco, la propia Ertzaintza trasladó hace meses "por los conductos habituales" a los mandos de los Mossos la presencia de elementos muy violentos del entorno proetarra en Barcelona. Elementos integrados en el recurrente movimiento okupa. El entorno afín a la banda terrorista y al antiguo Jarrai va a ser reforzado además este fin de semana gracias a Bildu.

El partido de Arnaldo Otegi ha fletado ocho autobuses para lo que, a través de sus foros, está denominando jornada de lucha. Cinco de estos autocares partirán desde Guipúzcoa, dos desde Navarra y uno más desde Bilbao. Todos en apoyo de sus socios de Arran, autodenominada Organització Juvenil de l'Esquerra Independentista.

Este conglomerado contará además con el apoyo de otros grupúsculos que pretenden aprovechar el despliegue policial en Cataluña para convocar manifestaciones en otras capitales como Madrid. Un ejemplo: Izquierda Castellana y el Sindicato de Estudiantes.

#SensePor pic.twitter.com/Gentpp1mGV

— Zabaldi (@Zabaldi) 25 de septiembre de 2017

La red internacional que conduce ... a Rusia

Desde que hace varios meses los independentistas comprobaron el escaso respaldo internacional  al procés, la Generalitat -empujada por el sector más radical de Esquerra- se ha codeado con el lado más oscuro de los antisistema europeos. Su broche: el encendido apoyo del fundador de Wikileaks, Julian Assange, al referéndum ilegal.

Y como informó ESdiario el pasado día 19, Puigdemont no ha tenido reparos, incluso, en recurrir a hackers radicados en Rusia para agitar las redes y disponer de sitios webs que sustituyeran a los que ha ido clausurando legalmente el Gobierno.

Puigdemont recurre a los servicios de hackers rusos para la guerra sucia de Internet

Con este panorama, sumado al anunciado desplazamiento a Barcelona de diversos grupúsculos ligados a la residual ultraderecha -pero igualmente violentos-, el CNI ha trasladado a La Moncloa las informaciones recibidas en La Casa desde el MI-5 (Londres), BND (Berlín), Sisde (Roma) y la DGSE (París).

Y el Gobierno no se lo ha tomado a broma. Con esta carpeta se presentó este jueves el secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, en la reunión de la Junta de Seguridad de Cataluña. Y ante el propio Puigdemont, su consejero de Interior, Joaquín Forn; y el jefe de los Mossos, el mayor Trapero confirmó los augurios que maneja el Gobierno.

La revuelta callejera la van a liderar los elementos más radicales de toda Europa en apoyo de la CUP. Pero, según confirman fuentes de Interior a este diario, ni Puigdemont ni Trapero quisieron darse por enterados.