Iglesias contra las cuerdas: 7 millones de euros pulverizan todas sus excusas

Rafael Isea, el que fuera ministro del Poder Popular para las Finanzas en el Gobierno y hombre de confianza de Hugo Chávez, se ha convertido en el azote de Pablo Iglesias desde el otro lado del charco. Según desvela el periódico ABC este viernes, el propio Isea identificó "sin ningún tipo de duda" la firma del Comandante en el documento que autorizaba el pago de siete millones de euros a la fundación CEPS, germen de Podemos y a la que pertenecía toda su cúpula en 2008. 

Además, aportó datos muy precisos de cómo se ratificó ese pago. La firma se hizo "con un rotulador rojo", según recordó el exministro ante los agentes de la UDEF que se trasladaron hasta el Consulado de España en Nueva York para tomarle declaración.

En su testimonio añadió además que ni un céntimo de ese dinero cobrado en moneda extranjera tributó impuestos en Venezuela y duda mucho de que lo hiciera en España. La fundación que realizó tareas de consultoría política, como Iglesias y los suyos reconocieron, estaba inscrita en calidad de ONG y por tanto, exenta de retención fiscal a efectos legales en aquel país. No así en España donde solo registraron en sus cuentas el pago de 4,2 millones procedentes de Caracas.

Además, el exministro venezolano acreditó que los asesores de CEPS, entre los que cita a Pablo Iglesias y a Juan Carlos Monedero, gozaban de tal confianza con Hugo Chávez que incluso disponían de un despacho en el Palacio Presidencial a solo a unos metros del que ocupaba el presidente. Por eso, le consta que es "altamente probable" que "otros ministerios u organismos públicos dependientes del Gobierno de Venezuela hayan podido transferir cantidades de dinero a estas personas por conceptos análogos". 

Según las ordenes que recibió del propio Chávez estas partidas donadas a CEPS estaban destinadas a "propiciar en España cambios políticos aún más afines al gobierno bolivariano".