| 25 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Ximo Puig y Mónica Oltra en la sesión de control al gobierno valenciano
Ximo Puig y Mónica Oltra en la sesión de control al gobierno valenciano

Puig y Compromís: empieza la partida por ver quién hace jaque mate a Oltra

El presidente desea deshacerse de su vicepresidenta, pero no ser él quien ponga el cascabel al gato, mientras Compromís se mueve entre el silencio y los insultos a la Justicia

| E. M. España

Ahora es cuando comienza la auténtica partida de ajedrez en el gobierno de la Generalitat Valenciana que preside el socialista Ximo Puig. La vicepresidenta y líder de Compromís, Mónica Oltra, está ya formalmente imputada por encubrir los abusos de su ex marido, y se ha convertido en una pieza incómoda para su gobierno donde el caso amenaza con tapar la gestión y minar la credibilidad a un año de elecciones. La cuestión es quién moverá primero las piezas para hacerle jaque mate a la reina Mónica Oltra.

Son muchos tanto en su partido como en el Palau de la Generalitat los que dan ya a Oltra por amortizada. La cuestión es cuándo se irá, si en una semana, un mes o en mayo de 2023. Y lo más importante, quién le va a decir que se vaya. Porque Oltra y sus más fieles colaboradores no van a dar su brazo a torcer. Ximo Puig espera que sea Compromís quien se lo indique, para no verse él en la tesitura de ser quien sea visto como el que rompe el acuerdo de gobierno y el difícil equilibrio entre PSOE y Compromís.

 

Ximo Puig ha tirado balones fuera, y una vez conocida la imputación, ha señalado que respeta la justicia y espera una “decisión justa”, pero su entorno está deseando que la vicepresidenta se vaya. Ya lo verbalizó la consellera de Justicia y pareja del propio Puig, Gabriela Bravo, cuando soltó que “yo en su caso me iría”. O el propio Puig insinuando una salida como la del ex alcalde de Alicante, que acabó dimitiendo tras ser imputado y procesado.

En Presidencia de la Generalitat son conscientes que el 'caso Oltra' quema la imagen de todo el gobierno -sólo hay que ver las ruedas de prensa de Oltra de los viernes y como la imputación lo acapara todo- y que se juegan perder las autonómicas de 2023, pero hay que ser muy sutil con los movimientos de ajedrez para no soliviantar a los incómodos socios del PSPV-PSOE.

 

Compromís, entre el silencio y el ataque a la Justicia

Y en Compromís, en principio, no piensan mover ficha. En principio. La coalición de Oltra se mueve entre el silencio y el ataque a todo el que ose cuestionar a la vicepresidenta, jueces y fiscales incluidos, metiéndolos en una gran conspiración de la ultraderecha. La consigna es agarrarse al palo ardiendo de que el TSJCV asegura que “no hay prueba directa” de la vinculación de Oltra con el encubrimiento de abusos, con ataques directos a los jueces de “ir a por ella” por gusto, como asegura Joan Baldoví, o por motivos ideológicos.

El argumentario de la persecución de la ultraderecha, por cierto, es tan endeble como que uno de los tres magistrados del TSJCV que ha decidido la imputación fue propuesto por Compromís y la fiscal que ha elaborado el demoledor informe es progresista.

Argumentos aparte, es curioso el silencio de algunos cargos de Compromís como el ex conseller Vicent Marzà, que algunos sitúan a la cabeza de la operación por sustiuir a Oltra de candidata en 2023. Marzà y el sector nacionalista de Compromís también pueden mover su ficha en el tablero de ajedrez y hacer jaque a Oltra, para consuelo de Puig.