Cs traiciona al PP y presenta una moción de censura en Murcia con el PSOE

Una operación de gran calado político se está ultimando en Murcia para desalojar al PP del Gobierno autonómico y del Ayuntamiento de la capital, en una maniobra que incluiría en la ecuación al PSOE, Ciudadanos y también incluso a Podemos.  

"Van a pasar cosas en Murcia en las próximas horas", confirman fuentes socialistas al máximo nivel a ESdiario, que recuerdan que hace un año y medio el PSOE ganó allí las elecciones.

Según fuentes populares consultadas por este periódico, tanto el Gobierno de Fernando López Miras como el Ayuntamiento de José Ballesta pueden cambiar de manos por sendas mociones de censura impulsadas por el PSOE y una parte de Ciudadanos.

A esta hora no está claro si la dirección nacional del partido, encabezada por Inés Arrimadas, respalda esa opción. "Cs es un partido que sabrá lo que tiene que hacer en cada territorio", señalan crípticos desde el PSOE.

Arrimadas descarta marcharse pese a la presión interna tras el desastre

A falta de que se haga oficial, varios diputados naranjas ya habría pactado con el PSOE sendas mociones de censura que conducirían a Ciudadanos a la Presidencia del Gobierno murciano y a los socialistas a la Alcaldía de la capital regional, abriendo una espita de imprevisibles alianzas en otros ejecutivos autonómicos donde existente alianzas ente populares y naranjas con desigual solidez.

De hecho, fuentes de la dirección nacional del PP advierten a Arrimadas: "Ellos verán. Se la juegan". En Andalucía, el acuerdo es muy estable; en Madrid está presidido por el recelo mutuo y Castilla y León es una incógnita, aunque a todos ellos les afectaría de un modo u otro lo que pudiera suceder en Murcia.

La gran duda es si Arrimadas impulsa la traición al PP o si no puede frenarla en Murcia o incluso en otras regiones

Allí, a falta de que haya pronunciamiento oficial de Arrimadas, fuentes populares muestran su incredulidad ante un eventual respaldo a esa operación, y la adjudican más a la decisión personal de varios cargos locales y autonómicos que, ante la caída de Ciudadanos, buscarían acomodo futuro en el PSOE.

Lo que sí es cierto es que las tensiones internas en Cs han alcanzado un punto álgido en los últimos días, con un sector crítico sustentado en varias baronías regionales que exigen un cambio de rumbo, de portavoces, de estrategia y la convocatoria de un Congreso extraordinario que, de momento, no está entre las prioridades de Arrimadas.

Crece el sector crítico

Fuentes críticas reconocen a ESdiario la existencia de una corriente que reclama un "rearme" de las propuestas del partido y un relevo de algunos de caras que afectaría, por ejemplo, a su portavoz nacional, Melisa Rodríguez. Y tenga o no que ver esto con la confusa situación de Murcia, lo cierto es genera un contexto de debilidad que avala las decisiones personales de concejales o diputados sin aval de sus direcciones.

Pero nada está claro y todas las opciones ahora mismo están abiertas: que se limite al Ayuntamiento murciano o se amplíe a la Comunidad; que  tenga el impulso de Arrimadas o carezca de su permiso o, incluso, que sean decisiones de barones "rebeldes" que acaben saltando a otras regiones donde hay coalición.