| 18 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Pedro Sánchez durante su comparecencia del lunes en Ferraz.
Pedro Sánchez durante su comparecencia del lunes en Ferraz.

Sánchez encuentra en Aragón su gran coartada para intentarlo con 85 escaños

Mientras algunos de los barones criticaban la posición de su jefe de filas, la dirección de Ferraz se mordía la lengua. Pero la dirección advierte: “Hasta aquí hemos llegado".

| Charo Zarzalejos España

“Hasta aquí hemos llegado”, ha dicho el núcleo duro de Ferraz harto de declaraciones públicas que “a la hora de la verdad no se concretan en nada. Ha llegado el momento de hablar claro y con una sola voz”. Con este ánimo, la dirección del PSOE asiste al Comité Federal del sábado en la certeza de que la votación será una nueva reválida para Pedro Sánchez. “¿Quién se va a oponer a que se consulte a la militancia?”. Mientras, el PP, lejos de intuir unas próximas elecciones, sostiene que aún es posible formar gobierno en la convicción de que en el PSOE “pasen cosas”.

Si algunos de los barones han venido criticando la posición de Pedro Sánchez, la dirección de Ferraz lleva tiempo “con los labios mordidos” para no responder a alguno de ellos pero “hasta aquí hemos llegado. Es el momento de hablar claro, de que digan todo lo que tengan que decir, que cada cual explique su posición y se tomen decisiones.

Pedro Sánchez quiere que haya una única voz en el PSOE. Lo que no dice es que quiere que sea la suya

Lo que no puede ser es esta marea constante cuando Pedro lo único que está haciendo es cumplir escrupulosamente lo que en su día aprobó el Comité Federal. Que digan lo que quieren abiertamente”. Si en algo ha insistido es en la necesidad de que ocurra lo que ocurra haya una sola voz en el PSOE. Sabe Sánchez que en no pocas ocasiones él mismo ha dicho que lo importante era el calendario institucional y no el del partido, pero “la situación que se ha ido creando era ya de vergüenza ajena y ha llegado el momento de poner orden”.

En Ferraz recuerdan que a Pedro Sánchez “le ha colocado la militancia y solo la militancia le puede quitar. Si hay alguien con mejores ideas no tiene más que presentarse y si gana que ese alguien sea la única voz, pero este coro que se ha montado es insostenible”. Ocurre que además de las declaraciones públicas, los contactos entre quienes critican a Sánchez se han multiplicado en los últimos días, de ahí que el secretario general haya tenido que reconocer la situación de división que vive su partido.

Pedro Sánchez, que tiene la convicción de salir bien parado el próximo sábado, ha reiterado su oposición a la abstención a Rajoy y aunque considera legitima la posición contraria, ha optado por abrir de nuevo el debate y que el Comité Federal decida. Sí tiene claro que si alguien le dice que 85 escaños no puede intentar formar gobierno, recordará, por ejemplo, cómo Javier Lambán, en Aragón gobierna con 18 escaños en un Parlamento con 67 asientos. ¿Qué mejor coartada?

Su propuesta de Gobierno alternativo tiene escasas posibilidades de éxito. Y, aunque ha asegurado que va a mantener contactos con los “partidos del cambio”, Albert Rivera, imprescindible en esa eventual mayoría, no está dispuesto en principio a dar apoyo alguno. Además de ninguna declaración de Podemos se puede concluir que haya desaparecido el veto al partido naranja.

En cualquier caso, Sánchez es bien consciente de la extrema dificultad que entraña su opción, de ahí que a no tardar se visualizará la presión socialista sobre Ciudadanos que “tendrá que valorar si le interesan unas terceras elecciones. Si hay que ir a las urnas corren el riesgo de convertirse en UPyD pero ellos tendrán que valorar los pros y los contras”. Pedro Sánchez, en ningún caso, quiere ser recordado como el responsable de unas terceras elecciones.

El PP no quiere entrometerse

En el PSOE se ha instalado una auténtica tormenta que la dirección cree tener bien controlada, justamente lo contrario que cree el PP que a día de hoy sigue sin descartar que puedan formar gobierno con el argumento de que en el PSOE “van a pasar cosas”. En Génova creen que “si los barones dan un paso al frente en serio, todo puede cambiar. Los que gobiernan saben que esta situación es insostenible”. En esta esperanza, el PP se va a mantener prudente en relación al PSOE “sin entrometernos en su debate interno pero manteniendo integra nuestra voluntad de acuerdo”.

En la agenda de Sánchez no está previsto un encuentro “oficial” con el PP, ni es intención de Mariano Rajoy insistir ante el secretario general “y menos ahora”. Los populares están satisfechos de los resultados del 25S  y creen que “Rajoy ha salido fortalecido porque se ha implicado y mucho en las campañas y además demostramos que en el PP hay banquillo. Nosotros queremos gobernar pero si el PSOE lo hace imposible iremos a elecciones. No dejan otra salida”.

Así las cosas, el PSOE se coloca en el ojo del huracán. Todas las miradas se dirigen hacia Ferraz, que es donde el sábado los socialistas libraran un pulso que se viene gestando desde hace meses pero que nadie ha querido librar en serio. Ahora Pedro Sánchez ha emplazado a sus críticos a lo que algunos consideran un auténtico reto con el que la actual dirección espera zanjar “por mucho tiempo” la actual situación de división interna.