| 19 de Abril de 2024 Director Benjamín López

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
Luis de Guindos durante su comparecencia tras anunciarse su candidatura.
Luis de Guindos durante su comparecencia tras anunciarse su candidatura.

La marcha de Guindos abre una pugna entre ministros para quedarse con Economía

Montoro, Báñez, Nadal y Tejerina exhiben sus galones para hacerse con su cartera. Sin embargo no pocos en el PP preferirían que Rajoy trajera un fichaje para revitalizar el Gobierno.

| Ana Isabel Martín España

La marcha de Luis de Guindos al Banco Central Europeo, si el 22 y 23 de marzo se confirma su designación como vicepresidente -triunfo diplomático que el Gobierno da por seguro-, deja el área económica del Ejecutivo sin el contrapeso que suponía el  ministro de Economía a las tesis de Cristóbal Montoro. Sin equilibrio, sin dos visiones, sin un modelo que ha acompañado a Mariano Rajoy desde 2011.

Por no hablar de que ha desatado una pugna silenciosa entre los ministros del área por hacerse con la cartera de Economía. Que es mucho más golosa ahora, en plena recuperación, que cuando Guindos la asumió en 2012.

Es posible que Rajoy sume las competencias de Economía a otro ministerio

Entre bambalinas, el propio Montoro, Isabel García Tejerina, Fátima Báñez y Álvaro Nadal están exhibiendo sus galones para hacerse con las competencias que deja Guindos, conscientes de que siendo Rajoy como es, cabe la posibilidad de que acabe sumando Economía a otro ministerio para no tener que hacer más cambios en el Consejo de Ministros.   

Sin embargo, a no pocos en el PP les gustaría que su jefe de filas aprovechara la ocasión para hacer un fichaje de campanillas que traiga aire fresco al Gobierno precisamente en su punto fuerte -la economía- y cuando el Ejecutivo trata de revitalizar su imagen dando un impulso a su actividad legislativa (por ejemplo, con el endurecimiento de la prisión permanente revisable). 

En este sentido este martes por la tarde los rumores en torno a Fernando Becker se incrementaron al saberse que deja Iberdrola después de dos décadas, aunque las fuentes del entorno de Rajoy consultadas por ESdiario dudan de que vaya a ser él el elegido.

Hacer cambios era precisamente lo que pretendía evitar el presidente cuando intentó persuadir a Guindos para que se quedara hasta ver alcanzar en 2020 el famoso objetivo del Gobierno, los 20 millones de españoles trabajando.

Sin embargo, el todavía ministro de Economía convenció al presidente de que él era una apuesta segura para dar a España la Vicepresidencia del BCE y paliar así, al menos en parte, la rácana representación española en los organismos europeos.

Rajoy es un presidente agradecido. Lo fue con José Ignacio Wert cuando el entonces ministro de Educación le pidió ser nombrado embajador de España ante la OCDE para reunirse en París con su pareja. Y lo fue también con su hasta hace semanas jefe de Gabinete, Jorge Moragas, cuando éste le solicitó marcharse a Nueva York como embajador ante la ONU.

"El presidente siempre me ha apoyado en todas las decisiones", señaló este miércoles Guindos en una comparecencia ante la prensa, después de ser preguntado sobre si Rajoy trató de retenerlo. En realidad en los planes del titular de Economía nunca estuvo una segunda legislatura en el Gobierno. Máxime sabiendo que seguiría siendo solo ministro y no vicepresidente económico, como a él le habría gustado.

En su comparecencia, con sabor a despedida, se hizo rodear por sus secretarios de Estado y subsecretarios y sacó pecho por los logros de estos seis año. Cuando España disfruta, dijo, de su quinto año de recuperación económica.