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De la Vega dimite del Consejo de Estado para el asalto de Sánchez al órgano
La exvicepresidenta con Zapatero renuncia como presidenta para que el Gobierno pueda designarla de nuevo vocal de la Comisión Permanente, un puesto vitalicio, y así blindarla.
La exvicepresidenta del Gobierno con José Luis Rodríguez Zapatero, María Teresa Fernández de la Vega, ha formalizado su dimisión como presidenta del Consejo de Estado, cargo al que Pedro Sánchez la aupó tras la moción de censura que llevo a Pedro Sánchez a la Moncloa.
Sin embargo, la dimisión como presidenta del órgano constitucional de De la Vega va a traer mucha cola y polémica, ya que podría enmarcarse en una maniobra más amplia de Sánchez por ganar el control abosluto del Consejo de Estado.
En concreto, la dimisión de De la Vega permitirá al Gobierno designarla de nuevo en su puesto anterior como vocal de la Comisión Permanente, uno de los nueve únicos cargos vitalicios de España. Esto significa que De la Vega quedará blindada en el Consejo de Estado de manera vitalicia aunque haya un cambio de Gobierno en la próxima legislatura, blindaje que no tenía como presidenta.
Pedro Sánchez tendrá que designar un nuevo presidente del Consejo de Estado, y mientras tanto la ley reguladora de la institución contempla una presidencia en funciones que recaerá en Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón para que no se produzca un vacío de poder.
Esta estratagema de María Teresa Fernández de la Vega, que algunos ya alertaban hace semanas, se sitúa en la estrategia de Moncloa de colocar peones socialistas en todos los resortes del poder, y es criticada por otros consejeros del órgano por considerarlo “un fraude” que sólo tiene como único objetivo blindar al PSOE frente a una futura derrota electoral.
