Receta de arroz frito: ¡Tu favorito!

Esta es una receta rápida de arroz frito a la que le puedes agregar todo lo que quieras: tus verduras favoritas, gambas, huevo, pollo o tiras de ternera. De esta manera consigues con muy poco esfuerzo un plato saludable perfecto para presentarlo como cena o almuerzo cualquier día de la semana.

Si quieres conseguir ese exótico sabor oriental que predomina en este tipo de recetas y obtener la textura correcta con un grano de arroz suelto y lleno de sabor, debes de tener en cuenta algunas recomendaciones.

Cómo hacer el arroz frito

El arroz

Todo comienza por preparar primero el arroz. Selecciona uno de grano largo: jazmín o basmati. El arroz se debe añadir completamente frio a las verduras salteadas. Incluso, si puedes, es preferible que lo cocines el día anterior para que mantenga la textura adecuada y todos los sabores se adhieran a él nada mas rozarlo. Si lo hicieras recién cocido tendría demasiada humedad y el resultado no seria el que buscamos.

Las verduras

Siéntete libre de seleccionar tus verduras favoritas, teniendo en cuenta que las que mejor le van a este tipo de arroz son las que se mantienen firmes y ligeramente al dente: zanahoria, espárragos, cebolla, brócoli...

El huevo

Para que quede esponjoso el truco es cocinarlo a fuego lento mezclando primero en un tazón los huevos batidos con un poco de leche. Has de derretir primero un poco de mantequilla en la sartén, volcar el huevo y cuando comience a cocerse por los bordes, remover hasta verlos esponjosos y suaves.

La salsa

Normalmente este tipo de receta incluye alguna de las salsas mas representativas de la cocina asiática.

Salsa de ostras: no te dejes engañar por su nombre porque no sabe nada a pescado. Es una salsa viscosa de color marrón oscuro que se prepara con una mezcla de jugos de ostra hervidos, que se han ido caramelizando suavemente con sal, azúcar y soja. El sabor que te vas a encontrar es ligeramente dulce y salado.

Salsa de soja: a estas alturas todos conocemos este sabroso condimento elaborado con soja y trigo fermentados repleto de aromas. Donde destaca un armonioso equilibrio entre lo dulce, lo acido, la amargo y lo salino.

Aceite de sésamo: otro clásico de la cocina asiática que se hace con semillas de sésamo. Su delicado sabor a nuez predomina con fuerza por lo que hay que prestar atención a las cantidades que se utilizan.

Y ahora sí, ¡hagamos juntos esta fabulosa receta de arroz frito!           

 Dificultad: Baja

Tiempo de preparación: 20 minutos

Ingredientes para 4 personas

300 gramos de arroz de grano largo

3 huevos

1 cebolla grande

3 zanahorias

1 taza de guisantes congelados

1/2 cucharada de jengibre rallado

 cucharadas de salsa de soja  

1 cucharada de salsa de ostras

2 cucharadas de aceite de sésamo tostado

3 cucharadas de leche

2 cucharadas de aceite de oliva

½ cucharada de mantequilla.

sal

Elaboración

 1.- Lava el arroz y ponlo a cocer en abundante agua con un poco de sal. Cuando consigas un punto al dente dale una buena ducha de agua fría para detener la cocción y deja que enfríe por completo.

2.- Derrite la mantequilla en una sartén y vuelca los huevos batidos con la leche. Cuando comiencen a cuajarse por los bordes remueve con rapidez hasta que se rompan y se vean esponjosos. Retira a un plato.

3.- En una sartén o wok calienta dos cucharadas de aceite de oliva y vuelca las zanahorias, la cebolla y el jengibre.

4.- Cocina durante 8-10 minutos y vierte sobre ellas la salsa de soja, el aceite de sésamo y la salsa de ostras. Remueve constantemente durante un minuto.

5.- Vuelca el arroz, sube la intensidad del fuego y fríelo sin parar de remover durante 2-3 minutos.

6.- Incorpora los guisantes, los huevos revueltos y mezcla para integrar.

7.- Sirve inmediatamente y si lo deseas añade unos aros de cebolleta por encima o un poco de cebollino picadito para decorar.