| 20 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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El huevo y la patata admiten tantas versiones como tu mente pueda imaginar.
El huevo y la patata admiten tantas versiones como tu mente pueda imaginar.

Cata la tortilla al estilo vietnamita en esta nueva ruta de Triball

Con trufa, con ajo tostado o el típico chorizo. El huevo y la patata admiten las más variopintas uniones. Si vives en Madrid tienes tres días para proba todas sin salir del barrio de moda.

| Alejandra Temprano Gastronomía

Primero fue el vermut, las tapas, las croquetas y ahora le llega el turno a la tortilla de patatas. Los comerciantes del barrio de moda de Madrid, Triball, o lo que viene siendo el triángulo mágico entre las calles Ballesta, Desengaño y Corredera Baja de San Pablo, organizan una ruta centrada exclusivamente en esta joya de la gastronomía española. Sus precios asequibles, entre 2,50€ y 4,50€ por un pincho acompañado de caña, cerveza artesana o vermú, te invitan a unirte a este selecto club de la tortilla.  

La tortilla siempre fue esa receta simple y económica que sirve para apañar una cena rápida o llevarla como plato estrella a un día de campo. Con cebolla o sin ella, pocos nacionales o extranjeros se resisten a un "pinchito" de este manjar para acompañar un aperitivo o la merienda. Cualquier hora es buena porque, según dicen los cocineros patrios, sobre los gustos de los españoles en relación a la tortilla no hay nada escrito. 

La Asociación de Comerciantes de TriBall rinde un homenaje durante tres días a la tortilla de patata y al sinfín de variedades que admite. Del 11 al 13 de febrero, 25 locales de la zona ofrecerán su particular versión de este plato con mezclas tan vanguardistas como tortilla de bacalo con ajo tostado, al horno, caramelizada, con trufa, con salsa de curry rojo o una vegana, para que los que no incluyen el huevo en su dieta también puedan participar. 

Esteban Sánchez, propietario de Eneri Taberna, lo dejó claro: "en un 90 por ciento de las veces (la tortilla) va bien con todo, es decir, al fin y al cabo estamos hablando de huevo y patata. ¿Y qué plato de nuestra cocina no lleva huevo y patata?". Su local es perfecto si la intención es degustar varios pinchos sin moverte del sitio. Su cocina preparará tres modalidades entre las que se incluye una muy castiza: tortilla con salsa de callos a la madrileña. La receta propia de la salsa de los callos aporta ese toque especial que te hace sentir como en casa, porque el paladar nota cuando una tortilla está cuajada con mimo. 

En la edición del pasado año, Sánchez sirvió más de 1.600 croquetas en los tres días de ruta y espera que este año la convocatoria sea igual de buena porque el producto servido en tamaño individual, pincho o tortilla familiar tiene mucho tirón. 

Si lo tuyo es la tortilla clásica, pásate por Villaverín o La Realidad; para amantes de la tortilla campera, Casa Perico o Sidi; de sabores especiales puedes encontrarla en Rutabaga (tortilla aromática vietnamita al curry), Desengaño 13 (bacalao con ajo tostado); Taberna Agrado (con patatas y trufa) o en Cutxi (de espinacas y salsa alioli).

En otros locales la patata da paso a otros tubérculos: batata y puerro o boniatos en Ñam, Ñam. Y así hasta un sinfín de posibilidades: con morcilla, mojo picón, picadillo de matanza... Nuestro consejo es que descargues el mapa online que ofrecen los organizadores del evento y no te prives de ninguna.