Losantos llama "loco furioso" a Sánchez y pide que Europa lo inhabilite

Federico Jiménez Losantos nunca hace prisioneros en sus artículos, y el último no iba a ser una excepción. La situación de la Comunidad de Madrid, intervenida por Pedro Sánchez para dañar a Isabel Díaz Ayuso, según su opinión, ha estimulado una de las epístolas más contundentes que se le recuerdan al periodista aragonés.

"Es un gobernante fuera de la Ley. Peor aún, contra la Ley. Fuera de la Ley se puede estar por error, descuido o abuso parcial, y es una situación corregible (...) Un Ejecutivo que no ejecuta la Ley sino que busca ejecutar, en el sentido de decapitar, el orden legal, está fuera de la Ley y debe ser apartado del Poder cuanto antes. Censura es poco: inhabilitación. Si no ante nuestro Rey, que está preso, ante Europa, que empieza a mirar atónita lo que está pasando en España", comienza el comunicador.

Para continuar: "El gran problema para restablecer el orden legal que, como prueba el caso de Madrid, está siendo deliberadamente atropellado es que Sánchez, como buen psicópata, es calculador, y para destruir el orden legal viene demoliendo el Poder Judicial a partir de la Fiscalía y mediante una serie de ropones que merecen la cárcel más que el cargo (...) Pero no estamos ante el habitual abuso de poder sino en manos de un loco furioso".

Losantos desvela el 'plan maestro' que Sánchez ultima en su paraíso amurallado

Los epítetos marca de la casa no paran ahí, pues también reserva frases muy duras para Ciudadanos por su actitud en el pulso a Madrid: "Y ahí se retrataron Inés Arrimadas e Ignacio Aguado. Inés, pidiendo que Ayuso hiciera lo que ordenaba Sánchez, sin saber que en el mismo momento en que ella se delataba, Calvo fingía una alternativa menos humillante; y Aguado, al apoyar a Calvo cuando acababan de anunciar la intervención de Madrid".

Mensaje a PP y VOX

Finalmente, lanza un mensaje a Casado y a Abascal, con la única solución que a su juicio tiene España: "El PP y Vox, que son lo que nos queda, deberían abandonar de una vez el postureo y la calculitis electoral. Jugar a ganar tiempo es perderlo de modo irrecuperable. Buscar mezquinamente la derrota del otro acelerará el hundimiento mutuo. Decía Abascal la semana pasada que si, ante la atroz situación provocada por el Gobierno, no presentase una moción de censura, valdría más retirarse de la política. Cierto: la moción no sobra, pero tampoco basta. Falta unidad. Y para eso hace falta una conciencia clara de ese peligro llamado Sánchez".