| 26 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
¿Estaría dispuesto Iglesias a cortarse la coleta por un puesto en el Gobierno?
¿Estaría dispuesto Iglesias a cortarse la coleta por un puesto en el Gobierno?

Los 4 cuatro motivos del declive de Podemos "cortan la coleta" a Pablo Iglesias

Quienes pensaban que Iglesias había tocado fondo con el enchufe de su mujer y la finca de recreo de Galapagar estaban pero que muy equivocados; aún les quedaba algo mucho peor que ver.

| ESdiario Medios

Pablo Iglesias irrumpió en política divinizando la juventud, condenando la experiencia y las canas como si fuesen la peste bubónica y despellejando a toda la clase dirigente previa a él. El líder de Podemos "proclamó endiosado que con él arrancaba una nueva era, la de la limpieza absoluta y las soluciones milagreras. Había nacido la Nueva Política, la efebocracia".

Sin embargo, este martes Luis Ventoso recuerda en su columna de ABC que "ahora el joven ya tiene 40 tacos, dos churumbeles (y otro de camino), una mujer a la que ha enchufado en la cúpula de su empresa y una hipoteca de varios ceros"; se ha vuelto mayor y se ha desgastado rápido.

Por si fuera poco, incide el periodista, "en su soberbia, tomó a su público por pánfilo e incurrió en los gustos mundanos de alto burgués que antaño denigraba. Iglesias comenzó a pinchar el día que le echó el ojo a Villa Galapagar".

Pero no solo eso, resumen, "el resto del declive de Podemos atiende a cuatro motivos: ponerse de canto en la unidad de España, su chapucera gestión municipal, el circo de las trifulcas internas y el hecho de que la ideología comunista es un añejo despropósito utópico" y si no, que miren a los griegos, "que tras probar la medicina del populismo zurdo acaban de propinar un puntapié al Podemos heleno, Syriza".

No obstante, matiza Ventoso, "quienes pensaban que Iglesias había tocado fondo con la finca de recreo de Galapagar se equivocaban. Ha logrado desacreditarse todavía más, arrastrándose ante la puerta de Sánchez implorando un puestecillo. Este Iglesias mendicante llega al extremo de que sus principios le importan un carajo con tal de que Sánchez le otorgue la prebenda".

Como ejemplo, el tema catalán, "donde sin discutirlo con nadie (lógico, porque Podemos son hoy él y su mujer) ha anunciado que a cambio de un carguito se olvidará de su tontuna de los referéndums de independencia y será un leal constitucionalista". Vamos, ironiza, que "Iglesias se cortaría la coleta por un ministerio" porque "el asalto a los cielos resultó ser esto: trepismo y canonjías".