Schlichting fulmina a Iglesias por su tremendo gesto de desprecio al Rey Felipe

Este jueves Cristina López Schlichting utiliza su columna de La Razón para remitirse a la RAE cuando define traición como "fallar a alguien o abandonarlo". Lo hace porque recuerda que apenas tres meses después de que Pablo Iglesias prometiera lealtad al Rey sobre la Constitución ha hecho propaganda de la república aprovechándose de su cargo de vicepresidente de España.

A su juicio, esto "no es solo fallar al jefe del Estado legítimamente votado en la Constitución de 1978", sino "aprovechar una pandemia mortal, con decenas de miles de muertos, para desestabilizar el Reino". 

En voz alta y muy indignada se pregunta "¿quién es este señor, que no sólo no ha ganado elecciones, sino que ha perdido muchos votos de su partido, para desautorizar lo que eligió la mayoría?".

Y aquí recuerda con ironía los "méritos" de Iglesias como "beneficiarse del apoyo económico de la dictadura venezolana a Podemos" o "saltarse la cuarentena que todos estamos padeciendo y hacer caso omiso de que su mujer estuviese con coronavirus". 

Cuando el líder de Podemos reivindica la república, argumentando los derechos de los trabajadores, le recuerda que "la segunda república nos llevó al enfrentamiento y la guerra entre hermanos y que muchos españoles han luchado por estos derechos a lo largo de la Historia, también los monárquicos".

Así, recalca que Iglesias quiere un "gobierno del pueblo, pero al parecer no el pueblo que superó el franquismo y se dio la constitución monárquica" y supone que "prefiere el poder del pueblo soviético, el que ya me dijo a la cara, en un programa de televisión, que admiraba".

Puesto que se molesta porque el Rey Felipe vista los uniformes militares de nuestros soldados, la periodista se pregunta si "¿estará pensando en Venezuela, donde el ejército es dictatorial y su jefe, un fantoche de chándal de colores?".

Concluye que no puede creer a quien promete lealtad al Rey y hace propaganda en contra en medio de una crisis sanitaria y económica sin precedentes en la Historia reciente: "Si no quieres ser vicepresidente en el Gobierno del Reino de España, no jures hombre, no jures":