La frustración de "Lady Falcon" por perderse un veraneo de palacio a palacio

"Castigado" sin vacaciones. A Pedro Sánchez se le hacía la boca agua pensando en las tres largas semanas de asueto que tenía ya previstas tras la investidura, pero el fracaso en su intento de lograr la presidencia le ha hecho variar los planes, al menos formalmente: nada de desaparecer por las brumas de Doñana, cuyo Palacio de las Marismillas iba a ser reforzado para que no le faltara de nada al presidente y a su familia.

Su gozo en un pozo, y con él también el de unas frustrada Begoña Gómez, según cuenta El Mundo este sábado. La Segunda Dama, si tenemos por primera a la reina Letizia, se ha quedado en tierra madrileña muy a su pesar, a la espera de que se obre el milagro y su Pedro pueda cogerse unos días que, como todo ser humano, sin duda merece.

Doñana contrata más personal para las idílicas vacaciones de Pedro Sánchez y Begoña

Pero como un alumno que suspende el curso y tiene que presentarse en septiembre, a Sánchez le toca "estudiar" en agosto, a ver si aprueba a la vuelta y se evita unas inciertas Elecciones Generales en noviembre. 

El periódico madrileño da detalles al respecto, "Este es un plan distinto al que tenía planeado la esposa de Pedro Sánchez para las vacaciones. Seguramente la familia quería veranear en alguna de las residencias oficiales a las que tiene derecho el presidente del Gobierno", explica la periodista Marina Pina.

Al concierto, sin Falcon

Y prosigue: "Sin embargo, la falta de investidura les convierte en inquilinos de La Moncloa en funciones y eso impide un largo mes de agosto fuera de Madrid. Begoña, que podría haber recibido invitados en el palacio de Las Marismillas, de momento no disfruta de los beneficios de la segunda dama. Por lo menos al Wanda no acudió en el Falcon".

Se refiere a la visita de Begoña Gómez con una de sus hijas a un concierto del grupo Muse, recientemente celebrado en Madrid, lo que le pone en bandeja a la cronista ironizar con todo ello: "Lady Falcon, la mujer del presidente del Gobierno, está en funciones como 'mujer de'. Si su marido tiene la agenda despejada, ella no puede ejercer el ansiado puesto de primera dama -que no es- que tan a pecho se ha tomado. No hay recepciones, viajes oficiales ni encuentro con sus ¿homólogas? de otros países europeos. A falta de apariciones públicas, Begoña ha decidido hacer escapadas lúdicas parecidas a las de Doña Letizia, la verdadera primera dama de España".