| 26 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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Joe Biden
Joe Biden

Estados Unidos sigue avanzando en su electrificación

El gobierno de Biden ha anunciado que invertirá 3.000 millones para fabricar baterías de vehículos eléctricos y ahonda en su estrategia para conseguir desplazamientos sin emisiones.

| Motor Lobby Motor

A partir de 2030 el presidente Joe Biden quiere que la mitad de los coches que se vendan sean cero emisiones. Para avanzar en ese camino, el Gobierno de Estados Unidos ha anunciado que destinará más de 3.000 millones de euros a apoyar el proceso de fabricación de baterías para vehículos eléctricos.

El asesor de Biden para coordinación de infraestructura, Mitch Landrieu, ha explicado que estos fondos proceden de la ley de infraestructura que el Congreso estadounidense aprobó el año pasado. La asesora del presidente para el clima, Gina McCarthy, ha concretado que el dinero se dedicará a procesar materiales para la fabricación de baterías, pero no a la extracción de nuevos minerales. 

El presidente Biden cuenta con el respaldo de los principales fabricantes de automóviles, los Tres Grandes de Detroit, como se conoce a GM, Ford y Stellantis, han expresado su apoyo a las medidas anunciadas por la Casa Blanca. En la actualidad, menos de un 2 % de todos los automóviles que se venden en el país son eléctricos, lo que coloca a Estados Unidos en el puesto número 20 de la clasificación mundial. China, su principal rival, duplica ese número  y la tasa de crecimiento de su mercado doméstico es el doble de la del país norteamericano.

Pero más marcas están dispuestas a revertir esa situación, y el Grupo Volkswagen acaba de anunciar que quiere ser el fabricante automovilístico que más coches eléctricos venda en el mundo, para lo cual el mercado americano es clave. Su objetivo es conseguir un 10% de cuota mundial, y para ello va a resucitar la marca Scout, famosa en la década de los 70 por sus todo terrenos. A partir de 2026 y con un SUV y un pick-up, el tipo de coches más vendido en Estados Unidos, esta enseña volverá a los concesionarios americanos.

Estados Unidos es un mercado emergente para los eléctricos y su potencial es enorme. Ford tiene serios problemas para satisfacer la demanda del Mustang Mach-E dentro de sus fronteras y cuenta con más de 200.000 reservas para el F-150 Lightning, la versión eléctrica de su modelo más vendido allí, por no hablar del imparable crecimiento de Tesla. Los estadounidenses quieren coches eléctricos, y sus carreteras limitadas a 55Mph de velocidad máxima son el escenario perfecto para disfrutar de la experiencia de viaje 100% sostenible que ofrecen.