El cobro por usar las autovías puede llegar a 5 céntimos por kilómetro

Por más que traten de esquivar el concepto, la realidad no va a engañar a nadie. El secretario general de Infraestructuras del PSOE, Sergio Vázquez, lo ha confirmado y habla en nombre de su ejecutivo, si un cambio de gobierno no lo evita, habrá peajes en las autopistas y autovías españolas en apenas 2 años. El anuncio contempla un "sistema de tarificación" por el que los conductores pagarán por el uso que hagan de las vías de alta capacidad, algo que ya se aplica en Portugal, donde el cobro depende de los kilómetros recorridos por cada vehículo, sin tarifas periódicas.

El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que Pedro Sánchez presentó a la Unión Europea ya contemplaba este impuesto encubierto, y aunque ahora no se han querido dar detalles del coste, se justifican en los motivos económicos para su implantación: "No tiene sentido que el mantenimiento y la conservación de la infraestructura se siga sufragando con los impuestos de todos los españoles", ha dicho Vázquez.

El encargado de lanzar el primer globo sonda de esta propuesta fue el ex ministro de Transportes, José Luis Ábalos, y se incorporó a los planes que envió el Gobierno a Europa para recibir los fondos de recuperación basada en dos motivaciones: la conservación de las vías a cargo de los usuarios y la apuesta por el transporte sostenible. Pero Unidas Podemos se opone sin ambages: "Que quede claro: nosotros no apoyaremos ninguna medida que haga pagar a la gente trabajadora. O se mantienen gratuitas, o se exime del pago a rentas bajas y medias, a transportistas y otros profesionales", afirmaba su portavoz en el Congreso, Pablo Echenique.

En los Presupuestos de 2022 están contemplados 1.400 millones de euros para mantener las autovías españolas, una cantidad que la secretaria de Estado de Infraestructuras, Movilidad y Agenda Urbana, Isabel Pardo, considera insuficiente. Es por ello que el estado ha calculado que el coste por kilómetro podría rondar un céntimo, aunque la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de infraestructuras (Seopan) o la de la Asociación de Empresas de Conservación y Explotación de Infraestructuras (Acex), han sugerido un coste para el usuario de entre tres y cinco céntimos por kilómetro.