| 24 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Al volante de la nueva y lujosa generación del Range Rover

La quinta generación del Range Rover llega con mecánicas diésel microhíbridas, gasolina, e híbridas enchufables, y en 2024 llegará una versión 100% eléctrica. A todo lujo desde 140.950 euros

| Marco Antonio Martín Motor

Del nuevo Range Rover, el modelo más lujoso y costoso de la firma británica, llega ahora a España la quinta generación de un modelo que nació en 1970 para inventar el segmento de los vehículos todoterreno de lujo. Además, se convertirá en el primero que incluya una versión totalmente eléctrica, a partir de 2024.

El nuevo Range Rover cuenta con dos longitudes de carrocería (SWB con batalla normal y LWB con batalla larga), varias configuraciones interiores a elegir (cuatro o cinco plazas para el SWB y cuatro, cinco o siete plazas para el LWB), cinco motores (dos diésel con hibridación suave MHEV, uno de gasolina y dos híbridos enchufables también de gasolina) y cinco niveles de acabado o equipamiento (SE, HSE, Autobiography, First Edition y SV). El precio parte desde 140.950 euros.

Las versiones híbridas enchufables de 440 y 510 CV de potencia, respectivamente, estrenan una batería de iones de litio con 38,2 kWh de capacidad bruta y 31,8 kWh de capacidad útil, con la que homologan hasta 113 kilómetros de autonomía eléctrica media para proporcionar una autonomía real de hasta 88 km, suficiente para que los clientes habituales de Range Rover completen el 75% de sus desplazamientos exclusivamente con el motor eléctrico.  

En un cargador de 7 kW puede cargarse en 5 horas hasta el 100% y en corriente continua de 50 kW puede alcanzarse en 40 minutos hasta el 80%. En un enchufe doméstico se tarda 15 horas en cargarse totalmente, según la marca.

El Range Rover SWB, de carrocería corta, mide 5,05 metros de largo y el de carrocería larga (LWB) mide 5,25 metros. La altura es de 1,87 metros y 2,04 de anchura.  

La nueva plataforma MLA-Flex, gracias a su arquitectura modular longitudinal, permite la adopción de modernas tecnologías, desde el desarrollo de un futuro Range Rover eléctrico y siguiendo por la dirección a las cuatro ruedas, con un ángulo de giro máximo de 7 grados en las ruedas traseras, que le hace más maniobrable o la suspensión Dynamic Response Pro predictiva, un potente sistema de control de balanceo activo electrónico, que persigue un mejor equilibrio entre dinamismo y confort.

Las versiones híbridas enchufables se benefician de la etiqueta Cero de la DGT: el P440 3.0 PHEV, con 440 CV (desde 153,350€), y el P510 3.0 PHEV, con 510 CV (desde 157.900€). Las dos variantes diésel reciben etiqueta Eco por su sistema de microhibridación y parte de 149.000 euros la versión D300 3.0 MHEV, con 300 CV, y de los 166.450 € la version D350 3.0 MHEV, con 350 CV.

Novedades tecnológicas y diseño para seguir compitiendo con el Bentley Bentayga, Lamborghini Urus o el Porsche Cayenne, entre otros.    

En ruta por el reino de las curvas

El primer tramo de pruebas, desde Pamplona, alcanzó el valle del Roncal, junto a la frontera gala. Un recorrido de montaña repleto de curvas que afrontamos con la versión diésel de 350 CV con hibridación suave y que alcanza una velocidad de 234 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 6,1 segundos.

Aunque su peso es de 2.505 kilos esta versión diésel nos permitió movernos con agilidad y sin balanceos por la sinuosa zona donde realizamos la prueba, predominantemente de subida hacia las alturas del Roncal. El recorrido de 130 km, en el que aceleramos con ganas, y con una velocidad media de 54 km/h, situó el consumo en 14,7 l/100km. El consumo combinado homologado parte desde 7,6 l/100 km.

La version V8 4.4 de gasolina con 530 CV, sin hibridación y que parte de 177.500 euros, nos bajó de las nubes del pirineo navarro hacia Pamplona con el acabado Autobiography (desde 196.650 euros). El descenso por innumerables curvas con buen asfalto y un último tramo de autopista nos dejó un buen recuerdo al volante: acelera de 0 a 100 km/h en 4,6 segundos y alcanza una velocidad máxima de 250 km/h. Buen comportamiento a pesar de sus dimensiones y peso (2.585 kilos) para solventar el trazado con total seguridad, ya que admite una conducción casi “deportiva” sin olvidar que llevas más de 2,5 toneladas.

Destaca el confort servido por un buen chasis y una buena insonorización mecánica, alterada ligeramente en autopistas por ruidos aerodinámicos. Del consumo, teniendo en cuenta el trazado y nuestras ganas de pisar el acelerador, llegó a los 20,4 l/100 k en una distancia de 126 km y una velocidad media de 75 km/h. La media WLTP homologada es de 11,6 l/100 km, que en ciudad anuncia 19,2 l/100 km. La capacidad del depósito es de 90 litros.

La dirección es precisa y los frenos aguantaron el peso y la “presión” del descenso con notable alto. El confort de marcha es sobresaliente, con buena amortiguación y asientos cómodos y lujosos.

Realeza británica

El SUV premium realza su moderna presencia con una parte delantera con un aspecto robusto, gracias al pronunciado dibujo de la parrilla y a los faros LED que proporciona un efecto de cristal tallado.

La zona trasera es más novedosa en el Range Rover. Destaca gracias a los faros verticales integrados en el panel único y permanecen ocultos hasta que se encienden, mientras que la sección horizontal integra el resto de los faros funcionales y define la anchura del vehículo.

En el interior el lujo y la calidad se extiende por todo el automóvil con todo tipo de detalles y materiales de primera. La instrumentación digital con una amplia pantalla central táctil de 13,1 pulgadas domina el salpicadero. En la primera fila de asientos hay mucha amplitud, aunque en la segunda fila el espacio es justo lo imprescindible para viajar cómodo, pero se echa de menos algo de espacio. 

En cuanto al ya clásico maletero, el portón consta, como en los modelos anteriores, de doble hoja, que se mueven con accionamiento eléctrico. La inferior admite el peso de dos adultos, que pueden sentarse sobre ella y recostarse sobre un respaldo abatible que forma parte del suelo de carga. El volumen del maletero es de 1.050 litros en el Range Rover de batalla estándar (SWB).

Con el accesorio Tailgate Event Suite, se pueden incorporar cojines de piel, altavoces e iluminación en el portón trasero dividido para conseguir un extra de exclusividad.

Los asientos traseros Executive Class incluyen función de masaje con piedras calientes y la consola central desplegable eléctricamente. También un nuevo controlador de la pantalla táctil para los asientos traseros.

Las versiones P530 4 .4 V8 AWD (177,500€), P530 4 .4 V8 A WD (181,700€) y P530 4 .4 V8 AWD (185.050€) estarán disponible a partir de marzo de 2023.