Educación fomentará la lectura en valenciano a través del comercio local

Es habitual que en algunos comercios, como por ejemplo las peluquerías, los tiempos de espera se alarguen. Hoy en día, solemos matar este tiempo muerto con el teléfono móvil, sin embargo, antiguamente, era habitual encontrar revistas o tebeos para amenizar ese tiempo de espera. Desde la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte, se quiere recuperar es hábito de lectura a través de la creación de “minibibliotecas” en los comercios locales para “impulsar la lectura entre la población adulta”.

A partir de enero de 2023, los municipios que se hayan adherido a este programa recibirán más de 3.500 libros del 'Lot Espera llegint’. El objetivo es que estos ejemplares, de fácil lectura, sean repartidos por los comercios de los municipios, conformando una "minibiblioteca de proximidad" para fomentar la lectura desde el comercio, aprovechando el tiempo de espera de los clientes para ser atendidos. La idea es que los visitantes puedan leer los libros en los comercios o llevárselos en préstamo si la espera es corta, detallan los impulsores de la iniciativa.

La minibiblioteca está formada por un expositor, diseñado por la ilustradora valenciana Alba López Soler; once libros de la colección 'Llegir en valencià'; una guía práctica con actividades y consejos para los comercios; folletos explicativos para los clientes de los comercios, sobre el funcionamiento de la campaña, y marcapáginas o puntos de lectura.

Fomentar la lectura y literatura valenciana

El objetivo de esta iniciativa, aparte de fomentar la lectura, es iniciar a una gran parte de la población en el consumo de literatura valenciana. Por este motivo, todos los libros que forman el catálogo de ‘Espera Llegint’ son de autores y autoras valencianos. "Leer es una actividad que se puede realizar en cualquier espacio y utilizar los comercios como difusores de literatura es una idea formidable", y ha añadido que "ojalá podamos cambiar la tendencia, y en vez de esperar turno viendo la pantalla de un teléfono, sea con un libro en la mano”, ha señalado Carmen Amoraga, directora general de Cultura y Patrimonio.