Rajoy encuentra unos aliados en Ciudadanos que allanan su camino a La Moncloa

Se siguen digiriendo los resultados electorales. Cuando el presidente del Gobierno, todavía en funciones, Mariano Rajoy, pedía “tranquilidad” desde Bruselas en realidad estaba lanzando un mensaje claro a Ciudadanos y PSOE. Es necesario reposar. Dejar los vetos. Plantear condiciones, pero programáticas. Y comenzar a dialogar y negociar de manera discreta.

Desde el PP ya se atreven a dar nombres de las personas de confianza de Rajoy que previsiblemente formaran parte del equipo negociador con Ciudadanos, Coalición Canaria y el PNV. Aunque al primero que llamará Mariano Rajoy será a Pedro Sánchez para intentar un gobierno de coalición, desde Moncloa son conscientes que esa es una posición de salida destinada al fracaso. No les importa.

El propio Rajoy ya reconoció, incluso durante la última semana de campaña, que en caso de que el PSOE no quisiera, la opción era la de formar un gobierno en solitario y en minoría. Para ello, está vez avalado por los resultados, Rajoy dará luz verde la próxima semana a la formación de un equipo negociador encabezado por la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría.

A ella le acompañaría personas de confianza del presidente del Gobierno como el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, el responsable de la oficina económica de Moncloa, Álvaro Nadal, el vicesecretario de organización del PP, Fernando Martínez Maíllo, o el ministro y ex portavoz parlamentario, Alfonso Alonso. Se trata de cubrir todas las áreas de la administración, los aspectos puramente políticos, el área económica, los asuntos territoriales y la política social.

Desde el PP están convencidos que en Ciudadanos dejaran pronto de hablar de sillones, como el sillón de Rajoy, y plantearan líneas rojas pero sobre aspectos programáticos, como de regeneración, ley electoral, educación o justicia.

Los fundadores de Ciudadanos advierten a Rivera

Ciudadanos necesita algo de tiempo, pero saben que tienen pocas salidas. Forzar el bloqueo y contribuir a un acuerdo llevaría consigo unas terceras elecciones, algo además de impensable, nefasto para los intereses de Ciudadanos. Albert Rivera ya ha recibido el primer recado para que se olvide vetos.

La mayoría de los intelectuales que firmaron el manifiesto fundacional de Ciudadanos se oponen al veto de Albert Rivera a Mariano Rajoy. Albert Boadella, Félix de Azúa, Arcadi Espada, Teresa Giménez Barbat y Félix Ovejero, que no tienen poder orgánico en la formación, coinciden con un artículo publicado en el diario El País por Francesc de Carreras, que también firmó ese manifiesto, que lee: “Entrometerse en las decisiones de otro partido no parece serio, ni es un buen precedente democrático, más todavía cuando Rivera sostiene, acertadamente, que no es cuestión de sillones sino de programas. ¿ Vetar a Rajoy no es hablar de sillones?”

Las aguas se irán serenando poco a poco, aunque también son conscientes que no hay demasiado tiempo. Aplazar la formación de un Gobierno para después de agosto tampoco sería un mensaje demasiado alentador a los ciudadanos.