| 18 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
Ana Botella y Rita Maestre
Ana Botella y Rita Maestre

Por qué Ana Botella triunfa y Rita Maestre hace el ridículo en tiempo real

El éxito de Madrid con su designación como Patrimonio Mundial lleva al recuerdo de Botella y al bochorno de la "partisana feminista" con una sonora metedura de pata.

| Mr. Meme Opinión

¿Quién le iba a decir a Ana Botella que, casi siete años después de dejar la Alcaldía de Madrid un poco por la puerta de atrás, iba a vivir su éxito más incontestable? ¿Y quién iba a decir que una de las rivales más enconadas de su partido, la portavoz municipal de Más Madrid, Rita Maestre, iba a hacer además uno de sus habituales ridículos, más estruendoso si cabe que los muchos precedentes?

Pues todo eso ha pasado a cuento de la designación del corazón de Madrid como Patrimonio Mundial, una merecida distinción que ya tenían, por distintas razones, el resto de las grandes capitales europeas. Y es que fue precisamente Ana Botella quien impulsó un lejano 2014 el expediente que ahora ha concluido con éxito, de la mano de otra ilustre caída, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes.

 

Ambas se lo "curraron" ante la UNESCO, que ya distinguió a Alcalá de Henares, Cuna de Cervantes, con ese emblemático título de Ciudad Patrimonio de la Humanidad, tan valioso como infrautilizado por el actual Gobierno complutense, dirigido por el socialista Javier Rodríguez Palacios, más pendiente de pelotear a Pedro Sánchez que de sacar partido de tan valioso tesoro.

Del aplauso al ridículo

Ante todo eso, el reconocimiento a Botella no ha tardado en llegar, para compensar tantos años de desprecios y memes, a cuenta de su matrimonio con José María Aznar (furibundamente criticado por el mismo Pablo Iglesias cuyas parejas, sin excepción, han tenido casualmente largas carreras políticas desde entonces), de su inglés olímpico y, en general, de todo.

Pero lo curioso es que, en lugar de reconocer lo obvio, la concejala madrileña nacida a los brazos de Podemos y criada a los de Manuela Carmena e Íñigo Errejón ha optado por lanzar una lisonja a la alcaldesa equivocada, adjudicándole el mérito a su antigua jefa, hoy reciclada en analista en radio y conferenciante de ese universo chachipiruli donde ella es un mito.

 

 

 

La "maravilla" es que una concejala de Madrid que cobra un pastizal por ello no sepa ni cómo y cuándo se lanzó una candidatura tan relevante: por mucho tiempo que dedique a soñar con ver arder capillas, Maestre tiene las suficientes vacaciones como para enterarse de lo básico. E incluso para leer las mordaces respuestas que su pavoroso ridículo han merecido:

 

  

No es de extrañar que la "partisana feminista", como se presenta así misma doña Rita, sea pasto habitual de la ironía del vigente alcalde madrileño, José Luis Martínez Almeida, autor de réplicas tan contundentes como ésta bien reciente, recogida por ESdiario en un vídeo viral que acumula visionados.

 

 

 

Queda, como contraste a tanta torpeza, el testimonio constructivo de socialistas como Javier Lambán, el presidente aragonés, muy emocionado con el triunfo de Madrid por un rincón que, como él mismo dice, es universal y es de todos. Los agradecimientos de Ayuso y de Almeida al dirigente del PSOE dan cuenta de unos esos escasos episodios donde la política, lejos de ser una trinchera, se convierte en agradable puente.