| 25 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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El diputado socialista Odón Elorza
El diputado socialista Odón Elorza

Odón, el blanqueador

Para el autor es inconcebible la deriva ideológica del diputado socialista que hoy en día prefiere la compañía de los herederos ideológicos de ETA

| Fernando de Rosa Opinión

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Hace unos días el diputado socialista, Odón Elorza, soltó una frase en el Congreso de los Diputados que heló la sangre a millones de españoles, utilizando las palabras de la madre de Joseba Pagazartundua, víctima de ETA.

La frase de Elorza: “Aquí no hay terroristas, pero sí franquistas y unas derechas de vocación golpista”, contiene unas palabras que han hecho estremecer a las víctimas del terrorismo, porque sí que hay políticos en el Congreso que justifican los crímenes de ETA.

 Elorza no tiene ninguna supremacía moral para blanquear a aquellos que justifican los crímenes terroristas y no condenan los homenajes a asesinos sentenciados, por mucho que en su época de alcalde se opusiera a Bildu, porque asumió la vara de mando en la alcaldía de San Sebastián de la mano del Partido Popular.

Es inconcebible la deriva ideológica del diputado socialista que hoy en día prefiere la compañía de los herederos ideológicos de ETA, a aquellos que han luchado contra el terrorismo y han sufrido en sus carnes decenas de asesinatos por el mero hecho de ser demócratas.

Afirmar que hoy en día no hay terroristas, es mentira, ya que tanto en Madrid, como en Vitoria, o Pamplona, y en cientos de ayuntamientos en el País Vasco y Navarra, hay diputados y concejales que se niegan a condenar el terrorismo y organizan actos de homenaje a terroristas condenados a su salida de la cárcel. Esas manifestaciones son actos de colaboración que en muchas ocasiones derivan en agresiones a militantes del Partido Popular o a agentes de la autoridad.

El odio que siempre manifiesta Odón Elorza contra los miembros de partidos de derecha, contrasta con su servilismo a los miembros de los movimientos golpistas o de los grupos que nunca condenan el terrorismo

El odio que siempre manifiesta Odón Elorza contra los miembros de partidos de derecha, contrasta con su servilismo a los miembros de los movimientos golpistas o de los grupos que nunca condenan el terrorismo, incluso es comprensivo con aquellos que chantajean a su propio gobierno exigiendo la salida de presos a cambio de apoyar los presupuestos. Por ese motivo, no tienen ningún valor democrático sus palabras y es sorprendente que las terminales de propaganda periodística de la izquierda justifiquen sus salidas de tono.

Porque es necesario el respeto a las víctimas del terrorismo, es necesario recordar diariamente lo que sufrieron y sobre todo, los casi mil asesinatos de ciudadanos ordinarios y servidores públicos que no participaban en guerra alguna pero que fueron destrozados por aquellos que se hacían llamar “soldados vascos”.

Odón Elorza hiela la sangre

Odón Elorza se ha convertido en un personaje que “hiela la sangre” al querer que olvidemos quien promovió, alentó y defendió a los grupos terroristas, y sobre todo, a aquellos que desde su puesto de concejales señalaban los objetivos de muerte, como se puso de manifiesto en múltiples sentencias judiciales. No hay que olvidar que hace un mes los diputados de Bildu en el parlamento vasco se negaron a respaldar una declaración institucional de condena a la “sinrazón y la injusticia que supuso la actividad terrorista de ETA”.

Deben evitarse falsas equidistancias morales o políticas, ambigüedades o neutralidades valorativas, y debe recogerse con absoluta claridad la existencia de víctimas y terroristas. Es necesario que se favorezca un desenlace en el que las víctimas se sientan apoyadas y respetadas, sin que quepa justificación alguna del terrorismo y de los terroristas.

 Son múltiples las voces que dicen lo contrario a lo gritado en el Congreso por el diputado socialista. Así pues, el Defensor del Pueblo sostiene que una adecuada atención a las víctimas del terrorismo es un deber del Estado de Derecho. De igual manera, ha hecho especial hincapié en la preservación de la memoria de lo sucedido en nuestro país y su conocimiento en los ámbitos nacional e internacional.

Elorza prefiere con su frase blanquear a los herederos de los etarras. Yo prefiero seguir la frase del presidente del TSJ del País Vasco: “Hacer justicia a las víctimas supone restaurar el daño personal, el daño político y el daño social”. No todo vale.