C´s paga en las encuestas andaluzas su permisividad con Susana Díaz

Las ocho provincias de Andalucía son las que más número de diputados aportan al Congreso: un total de 61 escaños, el doble que Madrid, Cataluña y Valencia. Siempre se ha dicho, y así lo tiene en cuentan todas las empresas demoscópicas, que la formación política que obtiene un buen resultado en las generales en Andalucía tiene mucho ganado en el resto de España.

Y eso le ha ocurrido al PSOE y al PP. Y con independencia de quién fuera la primera fuerza política. El resultado de la segunda fuerza en Andalucía tenía mucho más peso y número de escaños que el resultado de la primera fuerza en cualquier otra comunidad o región de España. Por la simple y sencilla razón de ser la que más aporta.

Pues bien, según las últimas encuestas y estudios electorales realizados a nivel interno tanto por el PP como el PSOE, el resultado de las próximas generales en Andalucía no será muy diferente al de anteriores comicios. Así lo han confirmado a este periódico tanto desde Génova como desde Ferraz, y en ambas circunstancias existe una coincidencia: Ciudadanos sigue sin tener en Andalucía la trascendencia que le otorgan otras encuestas y no pasa de los 15 diputados repartidos en las ocho provincias.

El dato puede ser definitivo para el resultado global de Ciudadanos el próximo 20 de diciembre, y aunque el PP y el PSOE siguen en caída libre en muchos territorios y provincias, es precisamente en Andalucía donde el bipartidismo aguanta con más fuerza.

La permisividad de Ciudadanos con la corrupción en Andalucía

Las razones de que Ciudadanos se desinfle son múltiples pero se debe sobre todo a la benevolencia y permisividad que la formación de Albert Rivera está teniendo con la gestión, nombramientos y casos de corrupción del PSOE en Andalucía. Desde Ciudadanos son conscientes que un porcentaje muy elevado de votos recibido en las últimas elecciones autonómicas es votante potencial del PP. Un votante que ha visto como su confianza ha servido para que continúe gestionando a su antojo el partido que lleva haciéndolo en Andalucía desde el inicio de la democracia, el PSOE.

El silencio de Ciudadanos con el último nombramiento de Susana Díaz ha sido otro ejemplo más de "mirar hacia otro lado". Sólo que en esta ocasión el nombramiento a dedo del nuevo director general de empleo de la Junta de Andalucía es demasiado evidente. Susana Díaz, con el silencio de Ciudadanos, ha elegido al exalcalde de Huevar del Aljarafe, Rafael Moreno, como la persona que estará gestionando las políticas de empleo de Andalucía.

Condenado en el año 2011 por una falta de injurias contra un funcionario municipal que era policía local; condenado en mayo de 2015 por pegar a un árbitro en un partido de fútbol de cadetes; y condenado en 2010 por vulnerar los derechos de la oposición del PP y no facilitarles la información necesaria para realizar sus funciones públicas.

Esta es sólo una parte del curriculum del socialista Rafael Moreno Segura, el nuevo director general de Políticas Activas de Empleo de la Junta de Andalucía, un puesto clave y que está en el centro de la polémica judicial por el caso de los ERE.

Es el último ejemplo, pero no el primero de una gestión del PSOE-A, que no obtiene crítica alguna por parte de Ciudadanos y que está calando en los votantes en Andalucía, la comunidad que más diputados aporta al Congreso de los Diputados.