Mariano Rajoy se pasa al cine... por una buena causa

Mariano Rajoy se pasa al cine. El que fuese Presidente del Gobierno entre 2011 y 2018 se ha puesto delante de una cámara para demostrar sus dotes artísticos. Eso sí, lo ha hecho de manera esporádica y por una buena causa. Aunque es verdad que nunca se sabe si terminará por gustarle esto de la ficción y el séptimo arte. Por el momento, el motivo que le ha llevado a este debut se llama Paco Arango y su proyecto Mi otro Jon, su cuarta película benéfica cuyas ganancias serán destinadas a mejorar la vida de los niños enfermos de cáncer y a ayudar a los damnificados por el volcán de La Palma.

De momento no sabemos cuál es el papel que le ha sido asignado al ex-Presidente del Gobierno, pero sí que habrá otros cameos como los de Ana Obregón, Macarena Gómez o Maria Luisa Merlo. El origen de Mi otro Jon podemos encontrarlo en una cena en la que Arango se inventó una historia para apaciguar con humor los dolores que confesó sentir su madre en su cuerpo con sus 88 años: un lugar donde alquilaban otros cuerpos para casos como el suyo, y así poder disfrutar haciendo locuras unos días, aunque añadió, "por desgracia mamá, solo les queda el cuerpo de un camionero vasco y no me parecía muy apropiado para ti…". El director, que ya tiene a sus espaldas otras tres películas con las que ya ha conseguido recaudar y donar más de 7 millones de euros para aquellas que más lo necesitan, ha ido compartiendo las vivencias del rodaje en sus perfiles de RRSS.

Carmen Maura es la protagonista de esta historia interpretando a Merche, una traviesa mujer que ante la noticia de su grave enfermedad decide cumplir sus últimos deseos. Entre ellos está ver el mar por última vez. Por este motivo invita a su hija Rocío (Olivia Molina) a visitar la isla de La Palma, pero en el último momento la salud de Merche le impide hacer el viaje. Reciben la sorprendente noticia de que una excéntrica científica (Aitana Sánchez Gijón) ha logrado transmutar el alma de una persona mayor al cadáver de un recién fallecido durante tres días para cumplir cualquier sueño. Merche se introducirá dentro del único cadáver disponible: un grandullón camionero vasco de 58 años (Fernando Albizu) para empezar una disparatada aventura provista de grandes dosis de ternura.