El silencio se apodera de la política valenciana tras las elecciones catalanas

El resultado de las elecciones catalanas de este 14 de febrero ha tenido su eco en tierras valencianas en forma, principalmente, de silencio. En una autonomía como la Comunitat Valenciana donde lo que ocurre en Cataluña suele tener cierta repercusión, llama poderosamente la atención que hoy pocos líderes autonómicos quieran hablar. Quizá porque muchos de ellos tienen poco de lo que presumir ante el resultado de ayer.

La mayoría de las miradas se dirigen principalmente a Ciudadanos, el gran perdedor de la jornada de ayer al pasar de 36 escaños a 6, un palo muy duro. En la formación naranja todos guardan silencio sepulcral. Su líder en la Comunitat Valenciana, Toni Cantó, tan locuaz en redes sociales comentando los temas de actualidad, permanece callado desde ayer. Su último comentario fue sobre Auschwitz. Nada de Cataluña. Y eso que algunos lo señalan incluso como un posible recambio de Arrimadas.

Otros dirigentes de Cs, como el portavoz en Valencia Fernando Giner, también guardan silencio ante el resultado catalán. Sólo algún diputado como Jesús Salmerón -crítico con la dirección de Cantó- ha retuiteado algún comentario invitando a la crítica y la reflexión en el partido naranja. 

En el PPCV también se impone la callada tras una jornada, la del domingo, donde algunos dirigentes mostraron su apoyo al candidato catalán, Alejandro Fernández, ya sea con comentarios o ayudando in situ como apoderados en las elecciones. La líder regional, Isabel Bonig, no ha comentado nada en redes de su resultado, pero sí ha hablado para Radio Intereconomía. Bonig pide “una reflexión con calma de los resultados” y destaca “la decepción de los constitucionalistas que no fueron ayer a votar” y coloca al PSPV “dentro de ese proyecto de ruptura y alianza con el separatismo”. 

En Compromís se ha intentado mantener cierta distancia con sus aliados del norte, y pese al éxito del independentismo, hoy en la coalición nacionalista no están muy festeros. Ya saben, la estrategia de que no les digan que son independentistas o les asocien con el catalanismo. Oltra no ha dicho absolutamente nada del resultado electoral y el portavoz en Les Corts, Fran Ferri, se dedica a destacar que el futuro gobierno de Cataluña “trabaje por las personas”. Nada de felicitaciones a ERC como si hicieron con el BNG y Bildu en las elecciones gallegas y vascas.

Quienes hoy se han levantado contentos son Vox. Su síndica, Ana Vega, está muy solicitada hoy en las tertulias para analizar el buen resultado de su partido en Cataluña. Ana Vega aprovechó para mandar un dardo a Pablo Casado: “definió en su día la moción de censura como un acto de la precampaña catalana que le iba a salir por la culata a Abascal. Hoy, no solo no dimite sino que sigue sin dar la cara y el PP culpando a VOX”. 

Otros que también están contentos son el PSPV, por razones obvias. El presidente Ximo Puig felicitó el triunfo de Illa y lo definió como “llamar menos y acordar más. Tumbar muros y alzar puentes. Dejar banderas y hacer gestión. Forjar un encuentro emocional”. Puig sacó su vena más poética, y no es para menos, su partido no sólo no pierde votos por la gestión de la pandemia, sino que además se refuerza.