| 24 de Marzo de 2024 Director Antonio Martín Beaumont

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La Comunidad Valenciana, que dirige Ximo Puig, está a la cola de España en vacunación
La Comunidad Valenciana, que dirige Ximo Puig, está a la cola de España en vacunación

La Comunitat: infravacunada

¿Acaso creen en el PSPV y Compromís que la economía volverá  a funcionar por generación espontánea ?

El 27 de diciembre de 2021 comenzó a bombo y platillo la ambiciosa campaña de vacunación en la que Pedro Sánchez vaticinó habría alcanzado a un 70 por ciento de la población con la llegada del verano. Lo cierto es que vamos camino del verano y salvo sorpresa mayúscula esos números no se van a dar desafortunadamente ni siquiera después del periodo estival.

Sencillamente y pese a los anuncios grandilocuentes de negociaciones exitosas con las farmacéuticas de turno para asegurar la adquisición de las dosis necesarias, no las hay y esto hace que quede en un segundo plano incluso la distribución y la programación logística que habilite espacios adecuados para la vacunación directa.

Mientras la vida sigue y las estadísticas muestran que esta la Comunitat Valenciana del Consell de Ximo Puig, el mismo que se pasa los días tratando de polemizar con Díaz Ayuso, está en el furgón de cola en las ratios de vacunación y la realización de pruebas de detección de positivos por Covid-19. Cuesta entender que un año después del comienzo de esta pesadilla que nos sigue azotando, no se comprenda que son las únicas herramientas, proactiva en el caso de la vacuna y preventiva en el de los test, de las que disponemos para tratar de anticipar contagios e inmunizar a la población.

Y que esta cuestión debería estar de manera permanente indexada como la cuestión prioritaria de un Consell que vive cada día que pasa más aislado en sus cuitas internas y más alejado de la sociedad, por mucho que de manera periódica haya colectivos a las puertas del Palau gritando en el desierto a la busca de un oasis de soluciones que desde luego no les llega con la puesta en marcha del Plan Resistir.

Nadie en su sano juicio puede cuestionar o criticar la adopción de medidas restrictivas de la movilidad o limitativas de la actividad en las circunstancias presentes, pero si cabe la crítica cuando las acciones proactivas de vacunación y preventivas de práctica de test son inferiores a las que debieran.

Ni tampoco cuando la carga impositiva permanece sobre unos sectores productivos a los que no se les pide que paguen sin permitirles trabajar. Sólo desde la Diputación de Alicante parece haberse comprendido que si no se apoya a los sectores productivos con bajada de impuestos y ayudas directas, estamos dejando caer a familias que viven un drama económico social de grandes dimensiones y también estamos dejando inutilizados a todos aquellos que están llamados a tirar del carro de la recuperación cuando la situación sanitaria lo permita.  ¿O acaso creen en el PSPV y Compromís que la economía volverá  a funcionar por generación espontánea ?