Teresa Campos se enfada con Paz Padilla y pide que no le pregunte más

La boda de Rocío Carrasco y Fidel Albiac ha despertado a los viejos fantasmas del pasado. Todo lo que un día parecía enterrado, ahora se ha revuelto para enturbiar uno de los momentos más importantes de la vida de la presentadora y el abogado. Y no solo a ellos, sino a sus seres queridos más cercanos que, de alguna manera, reciben los golpes mediáticos que Rocío no consigue frenar. Es el caso de María Teresa Campos y de Terelu Campos, más que amigas y conocidas. 

Sucedió durante la intervención de la veterana presentadora en el plató de Sálvame donde, cada semana, se encarga de transmitir los mensajes que la audiencia graba para opinar de los temas más candentes. Y uno de ellos, evidentemente, era la boda del año. Sin embargo, los colaboradores del programa no dudaron en resaltar que Teresa estaba algo nerviosa, incómoda e incluso enfadada por el trato que se estaba dispensando a la que ella considera una especie de hija: "Te notamos incómoda, no sé si es porque consideras que estamos siendo injustos con ella", replicaron algunos contertulianos, a lo que la Campos respondió tajante: "No, no creo eso, aquí cada uno puede dar su versión y su punto de vista y es respetable. Tan respetable como que yo prefiera estar en silencio y no responder".

A pesar de su evidente negativa, Paz Padilla intentó de nuevo saber cuál era la opinión ante la caída del velo que está sufriendo Rocío Carrasco, la apertura mediática a poder hablar sobre los asuntos que, hasta hace muy poco, eran abordados de forma anecdótica. Fue cuando, muy seria, María Teresa, se refirió a Paz y espetó: "Entre calé y calé no cabe la buenaventura". Un tirón de orejas en directo que, en efecto, evidenció su enfado.