Moncloa provoca otra salvaje acción contra Pablo Motos: esta vez muy preocupante

Se lo venimos contando puntualmente en ESdiario: Pablo Motos es uno de los enemigos mediáticos a batir por La Moncloa. También por parte del resto de la izquierda que ha visto en el presentador de El Hormiguero una feroz amenaza por la sencilla razón de no comulgar con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez o con sus socios de Gobierno.

El penúltimo empeño de Sánchez contra Motos es el fichaje, que se resiste pero se formalizará en poco tiempo, de David Broncano por RTVE para competir contra el de El Hormiguero con dinero público, llevándose La Resistencia desde Movistar Plus hasta La 1.

Al margen de los millones que nos va a costar a los españoles, hablamos de 28 millones de euros para 18 meses de programa, digamos que, como ocurre también con el caso de Carlos Herrera o Ana Rosa Quintana, hay una auténtica cacería en marcha contra el comunicador de Antena 3 que se expresa sobre todo en las redes sociales con auténticos mensajes de odio a los que, por cierto, hace oídos sordos la Fiscalía.

Las críticas a Motos y otros periodistas no afines a La Moncloa se extienden también a los numerosos medios de comunicación (o pseudo-medios como algunos digitales) que están al servicio de Sánchez.

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Con este calvo de cultivo impulsado desde la izquierda y desde la propia Moncloa, ahora la cosa ha ido más lejos y, por primera vez, el inaceptable acoso a Pablo Motos ha pasado de lo virtual a la calle: algunos rincones de Madrid han aparecido con pasquines contra el presentador valenciano de Atresmedia.

Tal y como ha contado el portal Informalia y ha comprobado ESdiario, algunas zona del centro de la capital amanecieron este fin de semana con panfletillos contra Motos colocados en algunas fachadas y repartidos también por rincones de la capital. En el pasquín se puede leer: “Hoy ha venido a putodefender España... El Fachoguero”. Un texto ilustrado con fotografías de Pablo Motos, el General Franco y las populares hormigas y mascotas del programa Trancas y Barrancas.

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Curiosamente, en esta ocasión las críticas relacionan a Pablo Motos con Franco, justo días después de que el presidente del Gobierno ‘rescatara’ el argumento de la dictadura franquista al visitar por sorpresa, y con el seguimiento de sus cámaras, el Valle de los Caídos en un acto propagandístico y cuasi guerracivilista para abrir la campaña electoral del País Vasco interesándose, supuestamente, por el trabajo forense de identificación de los restos mortales que allí reposan en Cuelgamuros.

El pasquín colgado en varias calles de Madrid.

Del mismo modo, coincide también con la campaña de Sumar contra Motos. Y es que los ex de Podemos han lanzado otra campaña contra el de Antena 3 encabezada nada más y nada menos que por la ministra de Sanidad, Mónica García. La ministra arremetió contra el comunicador valenciano por promocionar “pseudoterapias” en un vídeo que Motos colgó en sus redes sociales.

“La ministra no tiene otra cosa que hacer que mirar mi Instagram”, se mofaba el propio presentador desde su programa para alimentar aún más las iras y el odio de la izquierda contra su figura.