Montón desobedece a Puig y se resiste a firmar el convenio con el IVO

La consellera, Carmen Montón, estaría dilatando la firma del acuerdo con el IVO por el temor a futuras responsabilidades jurídicas. Esta es la última noticia que circula por Presidencia de la Generalitat  y la Conselleria de Sanidad y que estaría poniendo en una situación muy delicada al propio jefe del Consell,  Ximo Puig.

Lejos de la aparente imagen de control del asunto, que Montón intenta  trasladar a los medios de comunicación, al declarar que está tranquila ante la rúbrica del acuerdo”porque no ha habido modificación en los pliegos y por lo tanto la tranquilidad es absoluta”, la realidad es bien distinta.  Y los es por dos motivos: Porque el acuerdo si introduce la libre elección, pasadas 48 horas, y porque desde Ribera Salud se anuncia una demanda contra ese acuerdo.

Aunque cabe señalar que en caso de demanda, ella es la máxima responsable, parece olvidar que es la palabra del presidente la que está en juego. Contrariarla, al menos, le podría traer serias consecuencias.

El último compromiso que adquirió el presidente Puig con la delegación del IVO el pasado domingo, era claro: El lunes o el martes, como mucho, el acuerdo estaría firmado. Y desde el centro hospitalario todavía hoy , no se tiene una fecha. 

La consellera insistía ayer lunes, en el Fórum Europa Tribuna Mediterránea, que los pliegos no habían sufrido ninguna modificación y que las reuniones con los representantes del IVO solo han sido para intercambiar opiniones y aclaraciones sobre el contrato.  “Con esas explicaciones se han sentido satisfechos" . Montón añadía que "no hay ningún tipo de modificación, ni de pliego, ni de anexo ni de nada" y ha insistido en que lo que se ha dado ha sido "una aclaración de dudas".

Un relato de difícil encaje, si tenemos en cuenta que una empresa que gestiona 600 trabajadores, y que tiene sobre la mesa un contrato de 54 millones de euros, se pueda aventurar en una proyecto empresarial, sin tener todos los acuerdos por escrito y bien atados.

Nadie que conozca la volatilidad de los cargos de la administración, que tan pronto están como pueden ser cesados, accedería a un acuerdo que no ate al milímetro todos los extremos y con todas las garantías jurídicas. Y un hospital de referencia mundial, que encima dirige un ex conseller, no parece al menos, que vaya a ser una bisoñez de empresa.  Al menos no, tras nueves meses de continuas desavenencias con la consellera.

Cabe recordar que al IVO ,la administración valenciana le adeuda, 40 millones de euros desde principios de año, y que a pesar de  llevar 9 meses sin concierto firmado, sigue dando servicios sanitarios diarios, que le suponen un gasto aproximado de 4 millones de euros al mes.

Lo cierto es que el nuevo convenio, que Montón se resiste a firmar, no sólo se incluye el acceso directo al IVO tras pasadas 48 horas, si el hospital público de zona no atiende el requerimiento de un enfermo, sino que además, amplia los servicios que prestará el IVO al incluir que los médicos de familia,  también podrán solicitar directamente pruebas de diagnóstico al hospital de Campanar.

Prueba de las modificaciones introducidas a posteriori, es el hecho que la nueva redacción del convenio cita expresamente la formación de una unidad de especialistas "que gestione la propuesta de remisión" al IVO. Algo que jamas ha formado parte del convenio inicial.