Iberdrola mantiene su compromiso inversor en EEUU

Es muy habitual que los reguladores estatales de EEUU rechacen operaciones, y aunque la operación con PNM Resources había sido aprobada ya por la Public Utility Commission of Texas (PUCT) y había pasado también aprobaciones federales varias, Iberdrola/AGR y PNM van a tomar las medidas que correspondan en defensa de sus intereses en relación a la última operación, al considerar que la decisión tomada no es la adecuada.

La operación es estratégica para el desarrollo de la eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán en el país americano, pero su compromiso con las inversiones allí previstas sigue intacto. Iberdrola está presente en EEUU desde hace 17 años y tiene un valor de activos de 40.000 millones de dólares en el país, de un total de 160.000 a nivel global.

Avangrid, su filial en Estados Unidos, es una sociedad cotizada en la bolsa de Nueva York. Es uno de los mayores grupos eléctricos del país, presente en 25 estados, siendo además una de las 3 mayores compañías de renovables, con cerca de 10.000 MW.  Avangrid da servicio a una población de 10 millones de estadounidenses, y sus planes de inversión 2020-2025 ex PNM son cercanos a los 30.000 M USD, focalizados principalmente en redes de transporte y distribución y en energías renovables.

Es especialmente relevante su acción en energía eólica marina, donde está construyendo el primer parque eólico marino de Estados Unidos (Vineyard Wind), que estará operativo en 2023/24, con una inversión de 3.000 M USD, para Massachusetts. Está también desarrollando un parque del mismo tamaño e inversión (800 MW, 3000 millones) para Connecticut (Park City Wind) que estará operativo en 2025/26, y está esperando la decisión para un nuevo parque eólico marino para Massachusetts de 1.200 MW con una inversión de más 3.000 M USD. Se espera la decisión el 17 de diciembre. A todo ello se añade un proyecto de hasta 2.500 MW en Carolina del Norte.

Para el grupo español la toma de control de PNM Resources apuntala su objetivo de reforzarse en Estados Unidos, un mercado que considera clave. La compra fue anunciada en octubre de 2020; entonces fue calificada de «amistosa», y logró que fuese recomendada por el consejo de administración de PNM a sus accionistas. El acuerdo estaba en línea además con la estrategia de invertir en negocios regulados y en energías renovables. Las autoridades de Nuevo México también se han fijado como meta eliminar los combustibles fósiles en la producción de energía para 2045. En este contexto, las organizaciones medioambientales apoyaban la operación: Avangrid se había comprometido con inversiones por 300 millones de dólares para reducir las emisiones de CO2.