Moncloa encuentra la "llave" para el indulto de Griñán, pero topa con sus socios

"El presidente va a respetar los trámites, los procedimientos y la decisión que tomemos será acorde con la ley y con absoluta transparencia". Esta es la frase que pronunció el propio Pedro Sánchez en una entrevista en TVE sobre el posible indulto al expresidente socialista de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, condenado a seis años de prisión.

Unas declaraciones que se produjeron justo antes de hacerse pública la sentencia del Tribunal Supremo sobre el caso de corrupción de los ERE en Andalucía, pero siendo conocedor del fallo que condenaba a los expresidentes andaluces Manuel Chaves y José Antonio Griñán y otros 13 exaltos cargos de su partido.

En ese momento desveló las pistas de cuales son sus planes y puntualizó que había que esperar a conocer el contenido íntegro y "a ver que dicen los votos particulares" de los magistrados del Supremo. Y aquí está el pretexto al que puede agarrarse Sánchez para justificar el que sería un indulto escandaloso si llega a producirse, porque la sentencia deja claro que establecieron un sistema fraudulento de entrega de ayudas por valor de 700 millones de euros. "El mayor caso se corrupción de la historia", cita el TS, que duró diez años y de la que "fueron conscientes", participaron y no la evitaron.

La impactante sentencia del "caso ERE" no deja margen a Sánchez para indultar

 
Los 'votos particulares' son 'la llave' de Sánchez

La estrategia desvelada por el propio Sánchez para librar al condenado ha contado hoy con la aportación de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, número dos del PSOE y exconsejera durante los gobiernos de Chaves y Griñán en la Junta. Durante una entrevista en Antena 3, la sevillana ha abordado el asunto pero no para lamentar la corrupción en su tierra, sino para dejar claro que la petición de indulto es un derecho que tiene cualquier ciudadano.

El derecho de otorgarlo es del Gobierno haciendo cumplir la ley y tramitando el expediente que derivará en la decisión final del Consejo de Ministros. También lo ha comentado la cercana excompañera de los condenados, para añadir: "Se pone en evidencia que ninguno se ha enriquecido personalmente, es decir, que no ha habido ningún lucro personal por parte de ninguna de estas personas imputadas". Asimismo, ha manifestado que tampoco ha habido "un enriquecimiento del partido político al que ellos se dirigían", su partido, el PSOE-A.

Me parece fundamental poder plantearlo porque ustedes saben que ya el señor Griñán asumió consecuencias políticas con motivo de esta situación, ni más ni menos que dimitió como presidente de la Junta de Andalucía.

A renglón seguido, Montero ha apuntado lo mismo que su jefe de filas, hacia los dos votos particulares que "entienden que no se ha demostrado que efectivamente no conocían ni habían participado de esos hechos".

Dos magistradas creen que Griñán no cometió malversación

Sánchez y Montero hacen referencia a que en el fallo de la sentencia del Supremo no ha existido unanimidad y hay dos votos particulares de las magistradas Ana María Ferrer y Susana Polo que creen que Griñán debería haber sido absuelto del delito de malversación, uno de los dos por los que ha sido condenado, junto al de prevaricación.

Consideran en su extensa argumentación que no hubo "dolo" (culpabilidad) en la actuación del expresidente, porque al situarse fuera de la Consejería de Empleo no participó en la ejecución de la fase final de los presupuestos, por lo que solo ven en él un "exceso de confianza" hacia sus compañeros de Gobierno.

Las magistradas aplican esta opinión a Griñán y a los exconsejeros Miguel Ángel Serrano, Jesús María Rodríguez, Francisco Vallejo y Carmen Martínez también condenados por ambos delitos.

Pues los posicionamientos mostrados por estas dos magistradas, de los cinco componentes de la Sala de lo Penal del Supremo que han ratificado la sentencia de la Audiencia de Sevilla sobe los ERE, pueden ser los mismos que utilice el Gobierno para otorgar la medida de gracia.

Podemos se opone a conceder el indulto

Casi todo podría estar encajado para llevar a cabo el plan, porque hay que recordar que la 'vieja guardia' socialista ya se ha pronunciado a favor del indulto: Felipe González, José Luis Rodríguez Zapatero, Alfonso Guerra y Susana Díaz.

El terreno se está abonando, pero se han encontrado un obstáculo dentro de su propio gobierno, ya que Podemos ha dejado de deslizar su postura y se ha pronunciado claramente en contra. El portavoz de Unidas Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, ha rechazado la posibilidad de que el Gobierno conceda el indulto al expresidente.

"Nosotros pensamos que la prerrogativa del indulto no puede ser utilizada para este tipo de cosas. Somos la fuerza política que más ha trabajado por desalojar a Mariano Rajoy de la Moncloa por corrupción y el indulto está para otro tipo de cosas"", ha subrayado en declaraciones a TVE.

También la titular de Igualdad, Irene Montero, ha comentado el asunto aunque sus palabras generan una gran desconfianza. Ha afirmado que "ni siquiera se ha producido esa petición de indulto", algo que ocurrió el pasado 1 de septiembre y fue presentado por la mujer de Griñán y sus hijos.

La petición de indulto de Griñán ya está en manos del Gobierno de Sánchez

Así ha añadido que "cuando se produzca lo valoraremos, pero lo que no cambia y permanece es ese compromiso de acabar con las peores prácticas del bipartidismo. Para eso gobernamos (...) Este es un país mejor cuando se destierran esas prácticas", ha señalado la ministra de Podemos.