Segunda condena de prisión para el exdirector de Invercaria

La macrocausa judicial que investiga las irregularidades llevadas a cabo por la empresa de capital de riesgo Invercaria, adscrita a la agencia pública de Innovación y Desarrollo de Andalucía (IDEA), da un nuevo paso. Hoy jueves se ha conocido con la sentencia de una de las piezas separadas de la causa, que se centra en las irregularidades en las contrataciones y gastos de personal a través de la entidad.

La Audiencia de Sevilla ha condenado al expresidente de Invercaria, Tomás Pérez-Sauquillo, a dos años y tres meses de cárcel por un delito continuado de malversación; y al que fuera director financiero de la entidad Antonio Nieto Garrido a un año, un mes y 15 días de prisión, como cooperador necesario en dicho delito.

El pronunciamiento judicial impone además cuatro años de inhabilitación absoluta a Pérez-Sauquillo y dos años a Nieto Garrido; aunque resultan absueltos del delito continuado de prevaricación que también se les achacaba, al aplicarles el atenuante de dilaciones indebidas.

Segunda sentencia condenatoria para Pérez-Sauquillo

Para el expresidente de Invercaria es la segunda condena que recibe, la anterior fue a tres años y medio de cárcel por la concesión de un préstamo de 100.000 euros a la empresa Aceitunas Tatis de forma arbitraria y sin evaluación.

Pérez-Sauquillo se libró de otro de los asuntos juzgados, como el caso de la diseñadora Juana Martín en el que fue absuelto, pero aún quedan más de diez causas pendientes de juicio y numerosas investigaciones abiertas en los juzgados sevillanos.

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Ahora queda probado que "decidió personalmente" la contratación de Antonio Nieto Garrido, Cristóbal Cantos y otros trabajadores sin contar con un convenio colectivo ni tablas salariales. Unos empleados "a los que fijó el salario inicial que él decidió libremente”, sin contar con ningún informe previo o autorización de la Dirección General de Presupuestos de la Consejería de Economía y Hacienda, como exigen las leyes de Presupuestos bajo sanción de nulidad.

No sólo elegía quién trabajaba y lo que ganaban, sino que las retribuciones iban aumentándose según el criterio del expresidente. Pérez-Sauquillo y Nieto Garrido, según la sentencia, "decidieron incrementar sus propias retribuciones y las de otros trabajadores, para así enriquecerse a costa de fondos de Invercaria que procedían de la Consejería, a través de la agencia IDEA.

Por ejemplo Pérez Sauquillo comenzó ganando en 2005, 108.182 euros anuales. Sueldo que fue incrementando hasta los 152.006 en 2008 y 140.472 en 2009. El exdirector financiero Nieto comenzó con un salario de 26.000 euros, que alcanzó los 106.229 euros en 2009. Querían enriquecerse a costa de los fondos públicos de la Junta de Andalucía

Absolución para el sobrino de Felipe González

En la sentencia emitida se absuelve libremente de los delitos de falsedad documental y malversación a los dos ex directores de Promoción de Invercaria. Se trata de Cristóbal Cantos, denunciante inicial de las irregularidades de Invercaria, y Juan María González Mejías, sobrino del expresidente socialista del Gobierno Felipe González.

La Audiencia afirma que las acusaciones centran su reproche penal en su participación en el delito que atribuyen a las dos personas condenadas, en relación a la extinción de sus respectivas relaciones laborales.

El máximo representante de la empresa decidió, sin corresponderle, extender el beneficio que tenían los trabajadores de la Agencia IDEA de acceder a un préstamo sin intereses de 15.000 euros a los de la propia entidad y ampliarlo hasta 60.000 euros. De esta forma muchos de los trabajadores de la sociedad solicitaron tal préstamo, entre ellos los otros tres acusados.

La clave de las acusaciones contra Cantos y González radica en la afirmación de que se confeccionaron documentos ad hoc para "cuadrar" las cantidades a percibir al liquidar su relación laboral. Pero los magistrados les absuelven porque, a pesar de que Invercaria ostentaba un crédito contra ellos por un préstamo que le fue concedido, también podía ostentar “legítimas reivindicaciones de naturaleza económica frente a la empresa”. 

Tras esta sentencia, para la que cabe recurso, se complican las cosas para la cúpula de Invercaria, que aún tendrá que escuchar más sentencias judiciales. Una causa con 40 piezas que ponen de manifiesto la trama de corrupción en la Junta de Andalucía durante los gobiernos socialistas.