El pasado del yerno de Jesulín de Ubrique augura un futuro rosa muy prometedor

Se llama Brayan Mejía. Tiene 20 años. Es sudamericano. Vivió en Murcia. Mantiene una estrecha relación con su madre, con quien siempre ha vivido, y ha enamorado a la segunda hija de Jesús Janeiro Bazán.

Actualmente juega en el Aranjuez Club de Fútbol. Tiempo atrás jugó en el Getafe donde comenzó su carrera profesional en el deporte.

Este pasado fin de semana compañeros del Getafe de Brayan han querido compartir sus viviencias con ESdiario. "Es un chico que se le ve venir. Es un chico que sabe lo que quiere e intenta sacar el mayor producto a las oportunidades que le ofrece la vida", explica un antiguo compañero de Bryan.

"Le gustaba mucho la fiesta. A veces no iba a los entrenamientos. Su objetivo era divertirse. Esa es la razón de no mantenerse en el Getafe C.F. y con el tiempo ver rebajada su categoría profesional a jugar con un equipo menor", concluye nuestra fuente quien mantuvo gran relación con el yerno de María José Campanario.

Julia Janeiro quien cumplirá 18 años el próximo 18 de abril mantiene una excelente relación con la familia de su novio. La madre de Brayan se ha convertido en una segunda madre para la hija mayor de Campanario y Jesulín desde que instaló su residencia en la capital de nuestro país.

La madre de Brayan es un referente para toda la familia y muy especialmente para su hijo, el deportista. La madre ha hecho de madre y padre. Una luchadora en tiempos difíciles. La generosidad de la madre ha hecho que Julia Janeiro sea una más de la familia aunque su familia de sangre resida en Arcos de la Frontera. Al ser aún menor de edad, es la madre de Brayan quien está pendiente de todos y de todo en el mismo núcleo familiar.

Cuando ESdiario pregunta si será posible ver a Brayan Mejía en una revista de los miércoles con casi total unanimidad aseguran que no sería una sorpresa verlo participar de la prensa del corazón como uno más y viviendo de este negocio. "Nos sorprendería que no lo hiciese. Que lo haga sería una cosa esperada. A él se le veía venir desde hace ya unos años", concluye.