| 16 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Íñigo Onieva y Tamara Falcó con Hugo Arévalo (a la derecha de la imagen),
Íñigo Onieva y Tamara Falcó con Hugo Arévalo (a la derecha de la imagen),

El adjetivo descalificativo con el que Iñigo Onieva retrata al "amigo" de Tamara

La marquesa de Griñón es una caja inagotable de sorpresas y apenas tres meses después de romper con su prometido tiene nueva ilusión. La "traición" ha afectado a dos de sus "hombres".

| Redacción Chismógrafo

"Nunca la he perdido". Con estas palabras Tamara Falcó confirmó que ha recuperado la ilusión en el amor tres meses después de su ruptura con Íñigo Onieva. A pesar de que todavía es pronto para poner etiquetas a su incipiente relación con Hugo Arévalo, la marquesa de Griñón se sinceró con varios periodistas y, después de salir a la luz su "especial amistad" con el empresario (que pertenece a su pandilla hace años y al que ha empezado a ver con otros ojos) ha admitido que han tenido "varias citas" en los últimos tiempos.

 

Una nueva ilusión de la que Íñigo ya estaría al tanto y, según reveló Leticia Requejo en El programa de Ana Rosa, no le habría sentado nada bien, ya que Hugo también pertenece a su círculo de amistades, como atestiguan las numerosas imágenes que tiene con uno de los creadores de Tuenti en sus redes sociales. Tan molesto estaría que no habría dudado en recriminarle su "traición" al "ligar con Tamara a sus espaldas" en un chat que tienen con un grupo de amigos.

Íñigo Onieva considera que Hugo Arévalo ha sido "desleal" al estrechar sus lazos con Tamara Falcó

Una información que ampliaba horas después el programa Y ahora Sonsoles, asegurando que el ingeniero habría llamado a Arévalo "rata", echándole en cara su "deslealtad" al estrechar su relación con la hija de Isabel Preysler sabiendo que él estaba haciendo todo lo posible por reconquistarla.

Algo que Íñigo ni confirma ni desmiente, aunque sí se mostró más hablador y amable que nunca con la prensa, cuyas preguntas ignoraba desde que se rompió su compromiso con Tamara el pasado mes de septiembre. Sonriente y muy educado, el ingeniero rompió su silencio para asegurar que "no voy a decir nada". "No tengo nada que decir, perdonad, muchísimas gracias", añadió con una sonrisa al escuchar el nombre de Hugo Arévalo, desvinculándose así de la nueva ilusión de la que estuvo a punto de convertirse en su mujer.