Las grabaciones de Gustavo Guillermo a María Teresa Campos (o de los "otros")

Las publicaciones de la privacidad de Teresa Campos llevan su tiempo. Todo indica que se empezaran a conocer. Todo indica señalar que será en las próximas horas. En los últimos días hemos conocido que no son 1.000 mil horas. Son menos. Quizás momentos puntuales. Algunos encuentros. Quizás dos. Y dos almuerzos.

Este jueves está anunciado que se conocerán estas grabaciones presuntamente realizadas por Gustavo Guillermo y su pareja Ainhoa. Puede ser. La autoría es distinta. Lo importante es conocer quién realizó esas grabaciones. El cerco se cierra. Y no es el de Leningrado. Ni la gran actriz María Jesús Valdés. La gran actriz siempre recordada. Las grabaciones existen. No es la primera vez que lo afirma ESdiario.

El tema es quien realizó esas grabaciones y cuándo. Es importante conocer el día que acudió Kiko Hernández y su amiga (otrora) Belén Rodríguez a almorzar a la casa de Teresa Campos. La hemeroteca dice que han sido dos veces. En aquellas reuniones hubo gente. Más gente de lo que se ha contado. Entre ellos se grabó. Y lo han decidido contar. Ahora no son amigos. Son antagonistas.

Gustavo Guillermo y Ainhoa no han grabado, han sido otros

Ahora falta tiempo. Tiempo para limpiar en el audio a quién no sacar en la grabación. La tecnología es un avance incluso para falsear la realidad. La grabación tiene que estar suficientemente limpia para que salgan los que deseemos que sean protagonistas Ha llegado el día. Vamos a ver quienes aparecen en la grabación y entonces ESdiario contará a quién se ha eliminado de ella. Es cuestión de técnica. Gustavo y Ainhoa no han grabado. Son otros, otras y otres ( por si acaso, entre sus defensores).

Gustavo y Ainhoa son pareja. Y vecinos. Viven en la misma urbanización. Comparten piscina. Y vistas. Las dos viviendas son de familias de clase media que llevan trabajando 30 años. Uno sin hijos y otra con hijos. La diferencia en distribución de una vivienda. Más allá de la economía. Gustavo tiene alguna habitación sin amueblar. Todo tiene su tiempo. No vive en un palacio. Ni siquiera amueblado en su totalidad. A veces la verdad rompe la noticia.