| 27 de Abril de 2024 Director Benjamín López

× Portada España Investigación Opinión Medios Chismógrafo Andalucía Castilla y León Castilla-La Mancha C. Valenciana Economía Deportes Motor Sostenibilidad Estilo esTendencia Salud ESdiario TV Viajar Mundo Suscribirse
José Luis Ábalos
José Luis Ábalos

No sólo Ábalos, Santos Cerdán debe ser el siguiente

La estrategia de convertir al ex ministro en un cortafuegos le ha salido mal al presidente. En lugar de sofocar las llamas ha creado otro incendio y la tormenta no finaliza aquí

| ESdiario Editorial

La estrategia de convertir a José Luis Ábalos en un cortafuegos le ha salido mal a Pedro Sánchez. En lugar de sofocar las llamas ha creado otro incendio. La inesperada rebeldía del ex ministro lo complica todo un poco más. Ábalos necesita el sueldo de diputado y también su aforamiento que le permite ganar tiempo ante una posible imputación.

No ha querido ser el chivo expiatorio de un caso en el que, como él dice, ni siquiera le han llamado a declarar como testigo. La decisión del PSOE de exigirle que deje el escaño contraviene las propias normas del partido, que fijan la dimisión en el momento de la apertura de juicio oral. Salvo proteger a Pedro Sánchez y a Santos Cerdán no tiene justificación que sus propios compañeros le crucifiquen a la vez que defienden su inocencia. 

En todo caso, la tormenta no finaliza aquí. Santos Cerdán, el número tres del PSOE, secretario de Organización y navarro como Koldo García, es el hombre que apadrinó en la política a un personaje de esa calaña, condenado por agresión, portero de prostíbulo y, para colmo, sin formación alguna.

Santos Cerdán debe explicar con qué propósito metió a un individuo como ese en el partido e incluso le colocó como cabeza de lista en el municipio navarro de Sangüesa en las elecciones municipales de 2011. Tiene que contar por qué pensó en él para formar parte en el grupo de máxima confianza que acompañó a Pedro Sánchez en su gira por España para las primarias en las que fue elegido secretario general. Y es preciso que argumente la razón por la que se lo recomendó a José Luis Ábalos que acabó convirtiéndolo en su mano derecha.

Es preciso que Santos Cerdán explique todo eso y que vayan cogiendo turno otros como Grande Marlaska, Ángel Víctor Torres y Francina Armengol. Este asunto no termina con Ábalos, ni aunque hubiera dejado su escaño.