Distrito Digital de Orihuela: lo escrito, escrito está

Creo que fue Shakespeare quien dijo: “Los que saben jugar con las palabras, con frecuencia las corrompen”. A mí, sobre todo cuando de políticos se trata, me gusta que las palabras queden por escrito para que luego no haya dudas a la hora de pedir cuentas. Vamos a ver si en las siguientes líneas consigo poner blanco sobre negro el tema que nos ocupa para que los zascandiles que están moviendo la colita no confundan a quien proceda.  

El 11 de diciembre de 2019, el presidente de la Generalitat anunciaba –así aparecía en los titulares de los medios de comunicación- que la ciudad de Orihuela albergaría el primer centro europeo específicamente dedicado al estudio y a la propuesta de medidas para minimizar el impacto de las inundaciones en el Mediterráneo, en el contexto del cambio climático. Las rotundas afirmaciones de Ximo Puig fueron pronunciadas ante los asistentes a la jornada científica que –cuando se cumplían tres meses de las inundaciones causadas por la DANA- reunió en la capital de la comarca a expertos nacionales e internacionales en climatología que debatieron medidas para paliar los efectos del tan vigente cambio climático.  

El presidente afirmó entonces que “este centro estudiará todos los cambios extraordinarios que se están produciendo en el Mediterráneo y analizará cómo adoptar las respuestas más oportunas”. Y, en efecto, en el Plan Vega Renhace, Eje 2, actuaciones en materia de emergencias climáticas (Actuación 11) aparece textualmente: “Creación de un Centro de Investigación de rango europeo en Extremos, Emergencias y Tecnologías del agua”. Es fácil deducir que se trata, ciertamente, del mismo Centro al que se refería en su momento Ximo Puig. O, en caso contrario, que alguien lo aclare. 

Posteriormente, en una reunión virtual celebrada el 27 de abril de 2020, en la que participó la consellera de Innovación, Universidades, Ciencia y Sociedad Digital, Carolina Pascual, con su equipo, junto a la representación municipal encabezada por el alcalde, Emilio Bascuñana, se ultimaron los detalles para la adhesión de Orihuela al Distrito Digital de la Comunidad Valenciana. El primer edil consideró que esta decisión de ubicar en Orihuela una de las sedes de Distrito Digital sería determinante para el desarrollo del municipio y la Vega Baja, reivindicando “la experiencia en el sector Agroalimentario y de Gestión Hídrica, así como del Patrimonio Cultural y el Turismo, desarrollando las Industrias Creativas, sin olvidar las medidas para combatir los efectos del Cambio Climático y la Sostenibilidad”. Por su parte, la consellera afirmó que dar este paso "es una prioridad para la Conselleria y una oportunidad para aprovechar la potencialidad de la ciudad de Orihuela y de su comarca". La consellera destacó también que Orihuela "será una sede fundamental en la estrategia de extensión de Distrito Digital". 

Mientras que los otros dos polos no llevan apellidos -solo la denominación Benidorm o Gandía- a Orihuela se añade ‘Vega Baja’

Poco más de dos meses después, Carolina Pascual y el alcalde Bascuñana formalizaban en la sede de Distrito Digital Comunidad Valenciana, en Alicante, el protocolo de adhesión por el que el Ayuntamiento oriolano pasaba a ser entidad colaboradora en materia de industrias creativas, culturales y agroalimentarias. En el acto, la consellera resaltó la importancia de la incorporación de Orihuela en la acción vertebradora de Distrito Digital, especialmente tras el temporal de la DANA, “al implicar una reconstrucción en la que la innovación y la digitalización pueden tener una gran aportación”. Avanzó Pascual que Distrito Digital realizaría una llamada a toda la comunidad innovadora internacional para captar soluciones competitivas con el objetivo de generar un hub de industrias agroalimentarias, culturales y creativas. “Es muy importante –enfatizó la consellera- que esa innovación llegue a todo el territorio también porque será un instrumento fundamental de recuperación económica en los momentos de recesión generados tras la pandemia por Covid-19”. Vale la pena citar aquí que, en el Plan Vega Renhace presentado en septiembre del pasado año -Eje 3, Desarrollo Económico, Actuación 20-, figura: “Gestión inteligente del patrimonio cultural. El proyecto pretende posicionar a Orihuela como referente en la gestión inteligente del patrimonio cultural de la Comunidad Valenciana”. Y, asimismo (Actuación 23) se especifica: “Creación del Distrito Digital de Orihuela y puesta en marcha de un Centro de Economía Creativa y Digital (Vivero de Empresas innovadoras, Lanzadera de Economía Digital, Hub Creativo)…”. Sobre esto, seguro, tendremos ocasión de escribir algo más adelante.  

El pasado mes de julio, con motivo de la Jornada Innovación Abierta, organizada por Distrito Digital Comunitat Valenciana, Carolina Pascual se refería a la expansión del Distrito y la creación de tres hubs innovadores en “Orihuela-Vega Baja”, Benidorm y Gandía, durante la presentación de los tres programas de retos internacionales de innovación abierta recién iniciados, enfocados a generar soluciones tecnológicas en los ámbitos del turismo, la agrotecnología, el cambio climático y la prevención de catástrofes naturales y de la salud. En definitiva, la consellera avanzó que la estrategia que se pone en marcha “prevé la extensión de Distrito Digital con la creación de tres polos de innovación en Gandía, dedicado a la salud; en Benidorm, dedicado al turismo; y en “Orihuela-Vega Baja”, sobre agricultura avanzada, por una parte, y cambio climático, por otra, “en este caso asociado al proyecto de Vega Renhace”, con lo que –cabe entender- se sumaba a lo anunciado anteriormente por el presidente. En cuanto al tema agrícola, efectivamente, también el Plan Renhace se ocupa del asunto, en el Eje 3: Impulso al sector agroalimentario y mejora de los procesos agrícolas mediante el uso de las nuevas tecnologías e Inteligencia artificial aplicada a la agricultura.   

Siga vertebrando, señor president

 Con su habitual perspicacia, un amigo nada chauvinista, me hace notar que mientras que los otros dos polos no llevan apellidos -sólo el nombre del municipio correspondiente- a Orihuela se añade el de “Vega Baja”. Y tiene, ciertamente, razón mi antiguo compañero. ¿A quién se le ocurre levantar suspicacias innecesarias? Pero hay más: en unas páginas especiales de las que encargan los correspondientes departamentos de comunicación, leo el pasado fin de semana que la captación de proyectos por Distrito Digital de la CV se ha visto reforzada con el reciente lanzamiento de tres challenges en sectores estratégicos para la Comunidad Valenciana, con el fin de que las empresas e instituciones nacionales e internacionales involucradas en estos retos den respuesta a necesidades de innovación y tecnología en materia de turismo, salud y la previsión de catástrofes meteorológicas y cambio climático. El desarrollo de estos programas de innovación abierta, y de sus posteriores aplicaciones, serán la semilla para la creación de clústeres especializados en las tres verticales, según se indica en dicha información institucional, que añade: “La enfocada en el cambio climático se desarrollará previsiblemente en la comarca alicantina de la Vega Baja, mientras que la dedicada a la salud se ubicará en Gandía, y la centrada en turismo lo hará en Benidorm, capital por excelencia del sector”. (Textual). 

“No me gusta como canta el pajarico…”, diría –visto lo visto- aquel viejo zorro de la política que fue el almoradidense Antonio Alonso Gutiérrez. Parece que alguien se está pasando de listo y, de porfiar en la suerte, puede dejar en mal lugar al molt honorable. Ellos verán. De momento, yo termino -como empecé- al shakesperiano modo: “En las cosas humanas hay una marea que si se toma a tiempo conduce a la fortuna; para quien la deja pasar, el viaje de la vida se pierde en bajíos y desdichas”. He dicho.