Era difícil pero ha ocurrido. Durante la votación, un parlamentario socialista se ha confundido a la hora de emitir su voto, paralizando el proceso y provocando carcajadas en el hemiciclo.
Este miércoles se ha puesto punto y final a la segunda sesión del debate de investidura del candidato del PP, Alberto Núñez Feijóo, con la correspondiente votación. Una votación que se ha hecho de manera nominal, es decir, nombrando uno a uno a los diputados y diputadas, que a viva voz emitían su voto. Mecanismo bastante sencillo y sin muchas complicaciones pero en el que los nervios -o el subconsciente quien sabe- te pueden jugar una mala pasada.
Cabía la posibilidad, pequeña pero la había, de que alguien se equivocara a la hora de emitir su voto. Dicho y hecho. Le ha ocurrido al diputado del PSOE por Teruel, Herminio Rufino Sancho Íñiguez, que al ser llamado por la secretaria de la mesa ha votado que sí a la investidura de Feijóo. Las caras de sus compañeros de escaño lo decían todo. Habría que ver la de Pedro Sánchez en ese momento.
➡️ El diputado socialista por Teruel, Herminio Rufino Sancho Íñiguez, paraliza la votación de investidura votando a favor de Feijóo
— COPE (@COPE) September 27, 2023
➡️ La secretaria de la mesa, del PSOE, le permite rectificar su voto al argumentar que ha pronunciado mal su nombre#InvestiduraEnCOPE pic.twitter.com/WFQyd10ZTl
Como es evidente, nadie se lo esperaba. Tampoco la secretaria de la mesa, la socialista Isaura Leal, a la que le ha salido del alma un “¿Cómo?” mezcla de pregunta y sorpresa. Visiblemente apurado, Sancho ha querido rectificar su voto al momento, ante las risas de los compañeros y el murmullo general en la sala, dando a entender que el motivo de su confusión había sido por el error a la hora de decir su nombre.
Y es que han dicho mal su apellido (Sánchez en vez de Sancho) y eso parece haber despistado al parlamentario turolense, que ha exclamado en primera instancia un sí que ha dejado perplejo a todo el mundo. Leal ha pedido disculpas por pronunciar mal su apellido y le ha permitido rectificar el voto. Hasta tres veces ha exclamado “no” Sancho mientras aumentaba el ruido en el hemiciclo.
Una anécdota durante la votación que en caso de haberse confirmado y su voto hubiera ido a Feijóo, nada hubiera cambiado. Sin embargo, nos vienen a la mente otros casos en los que este tipo de errores sí que fueron decisivos. El más reciente, el de Alberto Casero, diputado del PP que se confundió a la hora de votar telemáticamente y permitió al Gobierno de Pedro Sánchez salvar su proyecto de reforma laboral.