| 19 de Abril de 2024 Director Benjamín López

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Pedro Sánchez, ante un militar que se cuadra ante él.
Pedro Sánchez, ante un militar que se cuadra ante él.

Malestar en el Ejército: Sánchez impone su Ley de Memoria a los militares

Si hay alguna institución en España que ha enterrado su pasado con ejemplar modernización, esas han sido las FAS. Pero Moncloa quiere también reabrir heridas y purgar símbolos allí.

| J.R.V España

Enterradas hace décadas sus etapas más oscuras, modernizadas al máximo y convertidas en ejemplo internacional, las Fuerzas Armadas Españolas encabezan una vez sí y otra también las encuestas como una de las instituciones mejor valoradas por los ciudadanos.

Los actuales componentes de los tres ejércitos conocen bien su cometido y se han formado en el respeto escrupuloso al actual marco democrático y constitucional. Aunque en los cuarteles y dependencias militares conviven también con tradiciones centenarias y símbolos propios a la carrera militar y su historia.

Por eso, la nueva Ley de Memoria Democrática provoca recelos en la cúpula militar, temerosa de que su aplicación en el ámbito de las FAS abra la puerta a la purga o la eliminación de determinados bienes, lemas o prácticas que simbolizan precisamente el paso de un ejército del siglo XX a uno del siglo XXI.

"Esta ley no va a hacer otra cosa que reabrir heridas cerradas y crear enfrentamientos dónde no los había", afirma a ESdiario un general del Ejército de Tierra en la reserva. Que enumera la larga lista de estatuas, menciones, placas o himnos que corren inminente peligro de la censura gubernamental.

 

 

 

Pero el Ejército no va a permanecer ajeno al revisionismo de La Moncloa. De hecho, el Gobierno ha dado de este mismo lunes dio el pistoletazo de salida para ello.

El Ministerio de Defensa ha creado un nuevo organismo para "el estudio, la coordinación y la planificación" de las actuaciones derivadas de la Ley de Memoria Democrática, que entre otras cosas exige la eliminación de emblemas del franquismo, el acceso a los archivos.

 

Margarita Robles, en una reunión del Consejo Superior del Ejército de Tierra.

 

En una orden ministerial publicada en el Boletín Oficial de Defensa, la ministra Margarita Robles decreta la creación de un Comité de Seguimiento para aplicación de la Ley de Memoria presidido por la subsecretaria de Defensa, Adoración Mateos.

Robles crea un 'Comité de seguimiento' a la purga de símbolos o tradiciones que Moncloa considera franquistas y se abre al revisionismo en los cuarteles

Su función será coordinar y planificar todas las implicaciones legales que la Ley de Memoria tenga en el ámbito del Ministerio de Defensa, tanto en el ámbito patrimonial como de acceso y consulta a la documentación de sus archivos, así como la tramitación de todos los procedimientos administrativos derivados de la nueva legislación y la colaboración con otras administraciones.

Este Comité de Seguimiento contará además con un comité técnico "que le asesore y le asista" y podrá reunirse todas las veces que lo dicte su presidenta, con apoyo de los Ejércitos y la Armada "para el cumplimiento de sus objetivos".

Además de la subsecretaria de Defensa, formarán parte de él el secretario general técnico del Ministerio como vicepresidente y una serie de vocales: el director de gabinete de la ministra, el director general de Personal, el de Infraestructuras, los segundos jefes de Estado Mayor de los Ejércitos y la Armada, el asesor jurídico del Ministerio, los directores de los gabinetes técnicos de la Secretaría de Estado, la Subsecretaría y del secretario general de Política de Defensa y, por último, la subdirectora General de Publicaciones y Patrimonio Cultural.

La presidenta del órgano será además la encargada de informar a la ministra de las decisiones que se vayan adoptando para aplicar la Ley de Memoria Democrática, publicada la pasada semana en el BOE después de superar la tramitación parlamentaria.