Sánchez advierte a Podemos sobre Defensa: “0 con el agresor o con el agredido”

Pedro Sánchez acaba con su turné por medios progresistas tras la cumbre de la OTAN para relanzar su imagen tras pasar por la cadena SER, La Vanguardia y TVE. Ahora era el turno en La Sexta con Antonio García Ferreras, donde Sánchez no ha salido de su argumentario en defensa de su apuesta por la OTAN, la culpa de todo la tiene Putin o su teoría de la conspiración de ‘poderes oscuros’ contra él.

Sánchez ha mandado un mensaje a sus socios de Podemos, a los que les ha llamado “minoritarios”, señalando que “no puede haber equidistancia entre el agresor y el agredido”, sobre la invasión de Ucrania, y pidiéndoles una "reflexión" para que se sumen a su “pacto de país” para aumentar el presupuesto de defensa al 2% en 2029 y aceptar la llegada de más destructores a la base de Rota.

El líder del PSOE ha centrado las críticas, y las culpas de todos los males, hacia Vladimir Putin, al que ha llamado Pedro el Grande que quiere recuperar la gran Rusia, hasta el punto que reconoce el mal dato de la inflación y dice que lo tenía previsto, pero culpa al corte de energía de Putin y dice que podría ser peor y que gracias a él no es tan malo. Sánchez admite que puede haber cortes de energía, pero lo achaca todo a la estrategia de Putin.

Y como no, la "ultraderecha" ha salido a escena, acusándola de “la falsa polémica de Ceuta y Melilla que es un debate de la ultraderecha recogido por el PP”, subrayando que “son España y que la OTAN habla de cada centímetro de los territorios”. Sobre las muertes en Melilla, se desdice y asegura que “lo de ‘bien resuelto' lo dijo porque no conocía la tragedia de muertos en Ador y que ahora no lo diría”, defendiendo eso si “las fronteras y una política migratoria regular.

Sánchez no ha aceptado que haya un cambio de ciclo tras las elecciones en Andalucía, circunscribiendo el resultado a un momento concreto, y ha continuado con su teoría de la conspiración señalando que detrás del PP y en contra suya “hay poderes oscuros y grandes compañías” a los que ha llamado “el viejo orden” porque él “es el parangón de las políticas sociales”.

El jefe del Ejecutivo ha asegurado que va a volver a ser el candidato del PSOE, “y quien dice que lo contrario son conspiraciones de señores con puro en Madrid”, que sí o sí va a haber un impuesto a las energéticas, llamando “lamentable” al presidente de la CEOE por criticarlo y que él no se considera “un dictadorzuelo” tras la acusación asaltar las instituciones del Estado.