Los planes de Colau dejan a Sánchez un poco más lejos de La Moncloa

Mira que está poniendo de su parte para llegar a La Moncloa, pero al líder del PSOE no paran de salirle obstáculos. Por si Pedro Sánchez no tuviera suficiente con las condiciones leoninas que le está poniendo Pablo Iglesias para darle su apoyo, amén de las humillaciones públicas a las que le está sometiendo el líder del Podemos, ahora llega la rama catalana del partido morado para complicarle un poquito más su objetivo de convertirse en presidente del Gobierno a toda costa.

Bastantes críticas internas tiene ya Sánchez por su, dicen los más veteranos del partido, excesiva indulgencia con los podemitas como para que ahora lleguen los de Ada Colau a poner el referéndum en Cataluña como condición sine qua non para apoyar al PSOE. Eso es lo que se desprende al menos de las palabras que pronunció este lunes el líder de EnComúPodem en el Congreso, Xavier Domènech, en Rac1 al asegurar que si Podemos y su confluencia catalana entran en el próximo Gobierno "habrá referéndum en Cataluña".

"El derecho a decidir es una prioridad" y defendió consultar a los catalanes como mejor instrumento para desbloquear la situación política entre Cataluña y el resto de España. Sobre la pregunta que debería formularse, abogó para que pida explícitamente "sobre la independencia de Cataluña, de 'sí' o 'no". No sólo eso, sino que al preguntársele si permitiría el uso del catalán en el Congreso en caso de asumir un eventual Ministerio de Plurinacionalidad que anunció Pablo Iglesias, respondió: "Evidentemente, sí".

Todo ello poco antes de comparecer junto a la propia alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, para anunciar la creación de una asamblea constituyente para copar un espacio que considera que no tiene representación política en Cataluña, y que girará en torno a la defensa de los derechos sociales, contra la corrupción y por el ejercicio del derecho a decidir

El espacio rehuirá la política tradicional en la que "las siglas y los nombres" están por delante de los mandatos ciudadanos, por lo que Colau no desveló su papel en el mismo y dijo que todo el que esté dispuesto a defender esas tres líneas será bienvenido.