Sanidad ha registrado ya 2.000 reacciones adversas a la vacuna de AstraZeneca

El Ministerio de Sanidad de Carolina Darias ha notificado más de 10.000 reacciones adversas a las vacunas contra el  coronavirus que se han inoculado en España.  Así se desprende de las estadísticas recogidas por Eudravigilance, la base de datos de la Agencia Europea del Medicamento, que registra todos los posibles efectos secundarios de cada uno de los fármacos existentes en el mercado. 

En total, son  11.328 casos registrados en la base datos Eudravigilance correspondientes a los posibles efectos secundarios de las vacunas contra el coronavirus de Pfizer, Moderna y AstraZeneca, las tres que hasta ahora se han inoculado en España.  

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Según la estadística consultada por ESdiario, la que más reacciones adversas ha generado hasta ahora es la de Pfizer, de la que se estudian 8.172 casos, aunque hay que tener en cuenta que es de la que mayor cantidad de dosis se han administrado (5,8 millones), lo que supone que solo en el 0,14% de los casos se ha producido algún efecto secundario de mayor o menor entidad.

Respecto a la de Moderna, España ha reportado 937 posibles reacciones, después de haber inoculado 448.536 inyectables a fecha del 29 de marzo, por lo que se han producido efectos adversos en el 0,2% de los casos. 

Por su parte, en el caso la vacuna de AstraZeneca, la más polémica por los posibles trombos detectados en algunas personas que han sido inmunizados con ella, Sanidad ha informado de 2.219 casos, de las 1,47 millones de dosis, lo que supone un 0,15%.

La mayor parte de las reacciones adversas se concentra en mujeres

Ya a nivel europeo, la estadística destaca que la mayor parte de los efectos secundarios se contemplan en mujeres. 80.689 de ellas (74,9%) presentan síntomas que podrían ser consecuencia de las dosis de AstraZeneca, 94.043 (77,4%) tras la inmunización de Pfizer y 6.876 (71,4%) tras la de Moderna.

La mayor parte de los efectos registrados son de tipo general y leve o referidos al punto concreto donde se ha inyectado la vacuna, aunque también se han registrado trastornos en el tejido musculoesquelético y conectivo y trastornos gastrointestinales.

Aún así, según aclaran la propia EMA, la información que obra en la estadística se refiere a "presuntos" efectos secundarios, es decir, a acontecimientos médicos observados tras el uso de un medicamento, pero que no necesariamente están relacionados con el medicamento o producidos por él.

La EMA volverá a pronunciarse sobre la vacuna de AstraZeneca la próxima semana

Por otra parte y tras el revuelo causado por los posibles efectos adversos de la vacuna de AstraZeneca, el Comité de Evaluación de Riesgos en Farmacovigilancia de la Agencia Europea del Medicamento reiteró este miércoles que no se ha identificado ningún factor de riesgo específico, como la edad, el sexo o un historial médico previo de trastornos de la coagulación, que establezca un vínculo entre los trombos y la vacuna desarrollada por la empresa farmacéutica. 

La vacunación avanza a buen ritmo al menos entre los ministros del Gobierno

La directora ejecutiva de la EMA, Emer Cooke, ha señalado que, aunque "no se ha demostrado una relación causal con la vacuna", sí que "es posible", por lo que "se están realizando nuevos análisis", por lo que se espera que emita una recomendación actualizada durante su reunión plenaria del 6 al 9 de abril.

Dos ministros vacunados así

No obstante, en España se ha extendido ya la administración de la vacuna más controvertida de todas ellas, la de AstraZeneca, en el grupo de edad de entre 55 y 65 años, con varios casos ilustres como receptores, casos de los ministros de Defensa, Margarita Robles, y de Política Territorial, Miquel Iceta. Ambos se han puesto la primera dosis antes de que lo hagan muchos mayores de 80 años pendientes de citación.

Desde este viernes, según la información oficial de Sanidad, se distribuirán por toda España un millón de nuevas dosis de esta controvertida vacuna, si bien no es previsible que se administren en buena parte del país, con excepciones como las de Madrid, que sí las inyecta en el hospital Zendal y en el Wanda Metropolitano durante el puente de Semana Santa.