Los “amigos progres” que siguen hundiendo la TV de todos

Los amigos de "La ceja", que han vuelto a arrimar el ascua a la mejor sardina, no paran de penalizar y arrastrar a la televisión de todos al mayor desastre de su historia. Los datos son paupérrimos y encima su administradora única, Rosa María Mateo, sigue elaborando cortinas de humo como abandonar el pirulí para reducir gastos, o echar a periodistas emblema de la casa -como Jesús Álvarez, que no es progre-.

Disparar con pólvora del rey

Qué fácil es jugarse el dinero de los demás para probar un formato. Ahora le ha tocado al progre y multimillonario Javier Sardá, que cerró el pasado sábado la segunda aventura de "Juego de niños" con la visita de los actores Dafne Fernández y Alejo Sauras. El espacio, que retornó en mayo a La1 tras veintisiete años, ha sido un rotundo fracaso al no liderar, ni acercarse, en ninguna de sus emisiones a los competidores. Ha estado muy por bajo de las esperanzas de TVE, transformándose en el enésimo descalabro de la cadena pública a lo largo de esta temporada.

El concurso desembarcó en la parrilla de La 1 a principios de mayo con la visita de Miguel Ángel Muñoz y Berto Romero. En su vuelta, "Juego de niños" firmó algo más del 8% de cuota de pantalla y 1,2 millones de espectadores, situándose como la quinta opción preferida por los televidentes tras "Sábado Deluxe", "El peliculón, Vengadores: La era de Ultron" y "La Sexta noche". Ese día el cinexín de mi vecina cerró por defunción, sino también hubiese quedado por delante.

Empeorando los, ya malos, datos de TVE

El programa empezó a dar síntomas alarmantes una semana después de su estreno, cuando en su segunda semana cayó al 5% de cuota de pantalla y se quedó rozando los 800.000 espectadores. Tras el parón obligado por el Festival de Eurovisión, "Juego de niños" recobró ligerísimamente el aliento de la mano de Ángel Llàcer y Marta Hazas, cosechando un 8% de cuota y algo más de 1,1 millones de personas. Este repunte fue un mero espejismo: la cuarta entrega del concurso se cayó hasta un 5% y lo vieron algo más de 700.000 personas, un golpe del que no fue capaz de recobrarse.

"Juego de niños" firmó su peor dato con la visita de La Terremoto de Alcorcón y el humorista Javier Veiga el 22 de junio, que generaron un 4% de share y casi 500.000 espectadores. Un dato inferior a la media frecuente de la cadena. La debacle se confirmó con el paso del tiempo, en tanto que al espacio le costó superar con mucho "sudor y poca gracia" el medio millón de espectadores a lo largo de sus últimos programas.

Sin tener los datos de la ultima emisión de "Juego de niños" han acumulado un 5,8% de cuota de pantalla y poco más de 700.000 seguidores de media, que supone quedarse muy por debajo -prácticamente 3 puntos menos- que el dato medio de La1 en el mes de julio. Este nuevo descalabro, sumado al de espacios como "Cena con mamá", "Lo siguiente", "El Continental", "Centro de salud Val Norte" o "La mejor canción nunca cantada", confirman la débil salud de la cadena, a la que cada vez le cuesta más lanzar un programa con determinada solvencia... y encima, todo ello, a cargo del bolsillo de todos los españoles y sin reparar en gastos.